BBVA encuentra "sorprendente" la "creciente" opinión sobre un desplome del mercado inmobiliario

Actualizado: viernes, 27 julio 2007 19:01


SANTA CRUZ DE TENERIFE, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -

En su último informe sobre el mercado inmobiliario español, el BBVA califica de "sorprendente" la "creciente" corriente de opinión que predice un desplome de esa actividad. El optimismo del banco se sustenta, en gran parte, en la buena marcha de la economía nacional y del ciclo expansivo internacional. Así, la actual caída de los precios inmobiliarios es la "menos brusca" de la historia española y coincide, "por primera vez," con un período de crecimiento económico, lo que hace prever, según el banco, que habrá un "ajuste gradual" en el sector.

El BBVA predice que a la caída en la demanda de viviendas le seguirá un ajuste en la oferta y adelanta que ya son visibles las primeras señales de esa situación. En cambio, el informe matiza el alcance que tendrá para el resto de la economía española la "moderación" del mercado inmobiliario. "Será limitado", asegura de forma reiterada a lo largo de todo el documento. La "esperada" ralentización económica no tendrá consecuencias "importantes" porque se está produciendo al mismo tiempo que el sector inmobiliario ha iniciado un ajuste para alcanzar el equilibrio sobre la base de las variables económicas fundamentales.

Esto significa que el precio del dinero dejará de ser tan importante como hasta ahora en la decisión de la compra y se equiparará con aspectos como el ingreso familiar disponible, la oferta de vivienda en relación al número de hogares, el coste de otras alternativas de inversión (en particular, la bolsa), y los precios del mercado de alquiler.

Los precios de la vivienda durante el primer trimestre de 2007 subieron un 7,2 por ciento anual, lo que supuso una caída de más del 11 por ciento en relación a diciembre de 2003; ese mes la subida de precios se situó cerca del 18,5 por ciento anual. Por ese motivo, el BBVA asegura que la actual bajada de los precios de la vivienda es la "menos brusca" de la historia de España y destaca que esta situación coincide ahora, de forma inusual, con un contexto económico "favorable". Esta vez, la situación no viene acompañada de recortes en el empleo, una subida "pronunciada" de los intereses o un deterioro en las expectativas de los hogares, como en las anteriores oportunidades.

Además, España está "lejos" de sufrir una crisis como la que EE. UU. ha experimentado hace poco debido a la insolvencia derivada del impago de préstamos de alto riesgo; los concedidos por instituciones especializadas a quienes carecen de posibilidades de endeudarse con los bancos por las vías ordinarias. El informe asegura que el mercado nacional carece de ese tipo de instrumentos financieros, mientras que lo "más aproximado" que hay en el país son los préstamos de reunificación de deudas y la refinanciación de hipotecas, que "han estado disponibles desde hace unos pocos años y sólo a través de un algunas instituciones crediticias especializadas".

CONDICIONES HIPOTECARIAS

Según el informe, la evolución del crédito también refleja la caída de la demanda de vivienda en España. El número de préstamos hipotecarios otorgados se ha reducido en un seis por ciento entre abril de 2007 y el mismo mes de 2006. La banca española busca disminuir el volumen de las hipotecas en relación con el valor de las propiedades y por ese motivo, ahora demanda más garantías. Se trata de una tendencia que continuará este año.

El BBVA asegura que las tasas de los préstamos hipotecarios para lo que queda de año se incrementarán en 0,5 por ciento, para estabilizarse alrededor del 5,5 por ciento anual en 2008. La subida del valor del dinero, así como del precio de la vivienda, ha sido superior al aumento de los ingresos de las familias. Esta situación ha desembocado en una creciente "erosión" del acceso a la vivienda medida en términos de ingresos destinados al pago de las hipotecas.

Así, las familias españolas destinaron durante el primer semestre de 2007 un cuatro por ciento más de recursos (hasta el 25 por ciento sobre el total de sus ingresos) que durante el mismo período de 2006 para hacer frente al pago de la deuda. La situación empeorará durante el último trimestre de este año para luego mejorar en 2008. El BBVA asegura que el "deterioro" del ingreso en detrimento del pago de la hipoteca se refleja en los "mayores períodos" de tiempo que toma ahora completar las ventas de las viviendas en relación a los años anteriores y en el "estancamiento" del número de operaciones durante lo que va de 2007 en relación al último trimestre de 2006.