Elvira Lindo: "Tristana, de Galdós, es una brutal novela erótica"

Actualizado: viernes, 28 agosto 2009 19:47

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -

Elvira Lindo, autora del prólogo del tomo 16 de la colección 'Galdós: Arte, Naturaleza y Verdad' --que el Cabildo de Gran Canaria ha puesto en circulación junto con el tomo 17 con el fin de difundir masivamente la obra completa "del más universal de los escritores canarios", Benito Pérez Galdós (1843-1920)--, expuso que la novela 'Tristana' "es una brutal novela erótica".

Así, el tomo 16 forma parte de las novelas del Galdós "maduro", con 'Tristana' y 'La loca de la casa', mientras que el tomo 17 recoge la edición de los títulos 'Nazarín' y 'Halma', publicados en 1895 y en las que el novelista ofrecía una mirada espiritualista al fin de siglo europeo.

Mientras que el tomo 16 está prologado por la escritora gaditana Elvira Lindo, el 17 fue encargado a James Whiston, catedrático del Trinity College de Dublín y crítico literario, según informó el Cabildo en un comunicado.

En esta línea, Lindo aseguró en el prólogo del tomo 16 que 'Tristana' "es, por encima de otras tantas cosas, una brutal novela erótica".

"El erotismo bulle en el fondo de la historia sin salir nunca a la superficie; esta contención es voluntaria y es una constante en el universo galdosiano", escribió Lindo, para quien dicha novela es "moderna, por sintética y honda".

Por su parte, el tomo 17 reúne las obras 'Nazarín' y 'Halma', escritas también en 1895. "Para liberales como Galdós, no hubo medio de parar el tiempo, ni de volver atrás el reloj de la historia, y estas novelas demuestran este agudo conocimiento de la necesidad de ajustarse a los tiempos, no de manera cínica y contemporizadora, sino con un sentido de realidad y transacción para con las instituciones que dan sentido y forma a la vida humana", escribió James Whiston en el prólogo de dicho tomo.

Asimismo, Elvira Lindo indicó que "es una injusticia que Galdós haya quedado enterrado bajo el manto de escritor decimonónico y rancio que le tejieron sus detractores". "Una injusticia que a los amantes de su literatura, que también somos muchos, nos duele, como si estuvieran profanando la memoria de un padre", agregó.