Armas destruídas por Guardia Civil tras ser depositadas en Intervenciones de Armas y Explosivos de Las Palmas - GUARDIA CIVIL
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Intervención de Armas y Explosivos de la Comandancia de Las Palmas, en colaboración con el Servicio de Material Móvil de la Guardia Civil, así como de las comandancias de Cádiz y Sevilla, ha realizado en el mes de septiembre la destrucción de más de 1.500 armas que había depositadas en las distintas Intervenciones de Armas y Explosivos de la provincia de Las Palmas, y que tras fundirlas se convertirán en objetos cotidianos.
Esta acción, explica la Guardia Civil en nota de prensa, realizada en cumplimiento de lo establecido en el Reglamento de Armas vigente, tiene como fin la retirada de la circulación definitiva de las armas que "nunca podrán acabar en manos equivocadas", contribuyendo así a reforzar la seguridad de todos los ciudadanos.
En este marco, las armas han sido trasladadas hasta una empresa siderúrgica situada en la península, donde tras un proceso de fundición, el acero obtenido se destinará a fabricar nuevos objetos de uso cotidiano, lo que permitirá cerrar un ciclo en el que "instrumentos creados tiempo atrás para causar daño, se transforman ahora en elementos útiles para la vida diaria".
Respecto a las piezas destruidas resaltan, por su gran volumen, las escopetas, aunque también figuraban rifles, carabinas, pistolas, revólveres, armas de aire comprimido, fusiles de pesca submarina, armas blancas, de alarma y señales, entre muchas otras tipologías.
En cuanto a las razones por las que estas armas habían llegado a depósito había varias, entre ellas, algunas correspondían a propietarios que solicitaron expresamente su destrucción; otras estaban sujetas a resoluciones judiciales o administrativas; además de las depositadas a petición de particulares y que superaron el plazo máximo establecido de un año, e, incluso, armas prohibidas al carecer de número de serie, marca o punzones oficiales.
Esta operación se enmarca dentro del Plan Integral de Control de Armas de Fuego (PICAF), una estrategia global destinada a dar cumplimiento tanto a la legislación nacional como a la Directiva de Naciones Unidas sobre armas.
Con el PICAF, la Guardia Civil persigue prevenir "riesgos tan graves" como el tráfico ilegal, la recuperación indebida de armas inutilizadas, la transformación de armas de alarma o aire comprimido en armas de fuego reales, e incluso la fabricación artesanal de ingenios capaces de disparar proyectiles.