Miles de personas se manifiestan en la capital grancanaria "contra el Gobierno regional y su política de cemento y hormi

Actualizado: sábado, 3 marzo 2007 17:02


LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -

Miles de personas se han manifestado hoy en la capital grancanaria "contra el Gobierno regional y su política de cemento y hormigón" para Canarias bajo el lema de 'No con mi voto' ante las próximas elecciones autonómicas y locales del 27-M.

El portavoz de Ben Magec-Ecologistas en Acción, Heriberto Dávila, explicó que "hemos organizado estas movilizaciones de forma simultánea en las islas de Tenerife, La Palma y Gran Canaria para protestar contra un Gobierno de Canarias que tiene unos planteamientos de infraestructuras basados en llenar estas islas de cemento y hormigón".

Dávila apuntó que "este modelo no es sostenible por ningún lado" y recordó que "hay graves peligros para destruir aún más si cabe nuestro medio ambiente por los proyectos de la central de Granadilla, las carreteras del norte de La Palma y en el caso de Gran Canaria con la autopista C-80 entre Agaete y La Aldea que va a acabar con el único pulmón verde que le queda a Gran Canaria destrozando para ello nuestro paraje natural del Parque Natural de Tamadaba".

El portavoz de Ben Magec señaló que "hay mucha gente que cree que esa autopista es un auténtico peligro para el Parque Natural de Tamadaba" y recordó que una reciente encuesta evidencia que "un 83% de los grancanarios quiere una carretera alternativa de montaña porque será menos impactante para uno de los entornos mejor conservados de la isla" grancanaria.

Dávila dijo que "esta vía de montaña se define por una carretera mixta que incluya tramos de de 40, 60 y 80 Km/h, pensada como mejor solución en cada parte del recorrido, que perfectamente puede incluir túneles en zonas como el Anden Verde, siempre que se no se viertan los escombros del vaciado dentro del Parque Natural, ya que éste aspecto es una de las ilegalidades actuales del proyecto del gobierno con 4 millones de metros cúbicos de escombros que colmatarán barrancos y laderas".

Para Dávila, "una carretera de montaña significaría, no sólo una reducción considerable del impacto ambiental, sino que también reduciría de forma significativa el coste económico de la obra, y en este punto proponemos que la reducción y ahorro de 240 millones de euros sean destinados a los necesarios equipamientos sanitarios, educativos, y de desarrollo local que legítimamente se vienen reclamando desde el oeste de la Isla".

Insistió en que Ben Magec "no se opone a resolver los problemas de seguridad de la vía actual, ya que apuesta sin reparos por una carretera segura", y apostilló que las movilizaciones conjuntas en las tres islas citadas quieren "llamar la atención sobre las actuaciones del Gobierno en materia de infraestructuras que esconden grandes pelotazos urbanísticos en forma de campos de golf, urbanizaciones y puertos deportivos que suponen la extensión de la especulación como mal endémico de Canarias".