Trib.- La Fiscalía mantiene 4 años de prisión para el acusado de intentar violar a una mujer en la playa de Las Canteras

Actualizado: martes, 8 abril 2008 17:14

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía ha mantenido hoy la solicitud de imponer 4 años y seis meses de prisión para Bouchaibe C., acusado de un presunto delito de agresión sexual al intentar violar a una mujer en la playa de Las Canteras, en Las Palmas de Gran Canaria, aunque el supuesto agresor se declaró "inocente" durante el juicio y dijo que él no hizo "nada".

La Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Las Palmas celebró hoy el juicio contra Bouchabe C., joven natural de Marruecos, que, sobre las 07.30 horas del 7 de julio del pasado año, "con el propósito de satisfacer sus lúbricos instintos abordó" a una mujer, de mediana edad, cuando ésta caminaba por la citada playa a la altura de la Clínica San José.

"Tras abalanzarse sobre ésta la derribó al suelo diciéndole que no le quería robar pero sí besar y violar", según el escrito del fiscal, que precisa que el acusado se colocó encima de ella y la intentó acallar introduciendo arena en su boca.

A continuación, "le bajó el pantalón corto que portaba con la intención de introducir su pene en la vagina, pero no lo logró a pesar de haberse bajado parcialmente los pantalones y tener el miembro viril al aire", debido a la resistencia de la víctima y de la intervención de dos viandantes que acudieron en su ayuda.

Sin embargo, el acusado, que necesitó un intérprete árabe, afirmó que "no es cierto" que asaltara a la mujer ni la arrastrara por la arena. "Yo no he hecho nada", dijo él mismo en español.

Añadió que no realizó el "acto sexual" con la mujer, al tiempo que insistió en que "no es cierto que tuviera su miembro viril al descubierto" ni que "le echara arena en la boca" a la afectada para evitar que gritara.

A preguntas de su abogado, Bouchaibe C. dijo que no recordaba nada de lo que pasó y que había bebido mucho, en concreto "una botella de ron de un litro y muchas cervezas". El inmigrante añadió que llegó por primera vez a Canarias en 2005, pero fue expulsado y después volvió otra vez a las islas.

"BORRACHO COCHINO NO PIERDE EL TINO".

La víctima, que comentó que el acusado "estaba más flaco" cuando la agredió, explicó que el día de lo ocurrido había caminado cuatro kilómetros cuando de repente le tiraron hacia atrás, pensó que "era una amiga" pero al darse la vuelta le dio "olor a alcohol".

Afirmó que el joven la "tiró" y, mientras le tapaba la boca echándole arena, se "bajaba los calzones". Ella le "arañaba la cara" y pedía auxilio. Añadió que logró quitarle un pantalón corto que llevaba y le hizo su bañador hacia un lado intentando penetrarla.

"Después vinieron dos muchachitas y pensaron que estábamos meneándonos", agregó la perjudicada, para quien el supuesto ataque duró 20 minutos y "si llegan a pasar 20 minutos más me muero". "Me tanteó toda y por todos lados", aseveró.

Tras lo ocurrido, se le "disparó la tensión" a la mujer, que, como consecuencia de los hechos, dijo tener "el pescuezo fatal", ya no va a nadar y transita por la calle con miedo y desorientada.

A preguntas del abogado de la defensa sobre el estado del acusado, la víctima insistió en que daba olor a alcohol, pero que "le vio bien, no cayéndose". No obstante, recordó el refrán "borracho cochino no pierde el tino".

TESTIGOS CREÍAN QUE ERA UNA PAREJA "JUGANDO" EN LA ARENA.

También declararon como testigos dos agentes de la Policía Local que destacaron que la mujer estaba "muy nerviosa" y que habían detenido al acusado mientras éste caminaba por la arena "como si no hubiera pasado nada".

Atestiguaron que la mujer tenía la cara llena de arena, mientras que el detenido tenía un arañazo en la cara y "síntomas de nerviosismo".

Un testigo que trabajaba en el tractor de la playa creyó en un principio que "era una pareja jugando" en la arena, pero luego observó a la "señora apurada" y dos muchachas que bajaron desde la avenida a la orilla para socorrerla. Al ver lo sucedido, siguió al chico y alertó a la Policía local.

Las dos jóvenes que ayudaron a la víctima manifestaron que iban caminando por la avenida cuando vieron a las dos personas y se pensaban que era una pareja hasta que vieron a la mujer gritando. Se sorprendieron, se acercaron al lugar de los hechos y una de ellas dio una patada al acusado para "quitárselo de encima" a la mujer.

"Él estaba encima de ella, tenía el pantalón desabrochado y el pene fuera mientras la sujetaba", aseguró una de las dos chicas, que añadió que él después siguió caminando "y ni siquiera corrió" para huir.

EL SUPUESTO AGRESOR "TENÍA UNAS COPAS".

Por su parte, los tres peritos manifestaron que, según los informes, el acusado era "consumidor excesivo de alcohol habitualmente" y, en el momento de la detención, el parte médico decía que había consumido alcohol, pero "no era una intoxicación grave como para ver mermadas sus dificultades".

Una de las peritos agregó que no se ha podido saber qué grado de intoxicación etílica exacto tenía el acusado, que, no obstante, "sí tenía unas copas".

El Ministerio Público solicitó la pena de 4 años y seis meses de cárcel con la atenunate de embriaguez, lo que el fiscal estima una "petición benévola ante las secuelas físicas y psicológicas" a la víctima.

La defensa, que antes del juicio pedía la libre absolución de su cliente, solicitó en su escrito final la pena de dos años de prisión, ya que se trató de una tentativa inacabada del presunto delito de agresión sexual "porque hasta el último momento hubo forcejeo".

El abogado de la defensa, Juan Manuel Merino, destacó que su defendido "no salió a ocultarse" tras los hechos, que "sería lo más sensato, y si no lo hizo es que muy completo no estaba".

"Con lo joven que él es y lo mayor que es ella y él no lorgó reducirla", agregó el letrado, que pidió una "condena justa".