Se planea crear nuevas tasas, por conceptos como telefonía móvil, apertura de zanjas o por cajeros y máquinas expendedoras en la calle
LOGROÑO, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento subirá en el ejercicio 2008 los impuestos entre un 2 y un 3 por ciento, y las tasas, un 2,7 por ciento, según informó hoy el concejal de Economía y Hacienda, Vicente Urquía. El proyecto será aprobado mañana en Junta de Gobierno, y, a finales de mes, por un pleno extraordinario.
Urquía detalló que, en el caso de los impuestos, el IAE y el Impuesto sobre Vehículos se incrementarán en un 2 por ciento; el IBI subirá un 2,17 por ciento, "porque el tipo impositivo sube del 0,47 al 0,48"; mientras que el Impuesto de Construcciones (ICO), que llevaba dos años sin variaciones, será el de mayor subida, un 3 por ciento, "por la subida del tipo del 2,98 al 3,07".
En cuanto a las tasas, la subida general será del 2,7 por ciento. En este sentido, el concejal de Economía señaló que "se sigue la tónica habitual" en la política fiscal "con la subida del IPC previsto para el año en los impuestos, y la subida del IPC real del año anterior en las tasas".
"La subida que vamos a hacer en el ejercicio 2008 es inferior a la que se hizo para este año", aseguró Urquía, quien señaló que "en las tasas, en concreto, es un punto menos". De este modo, y según sus cálculos, una familia media tendrá que pagar este año 9,91 euros más por sus impuestos y tasas, "una media de 0,82 euros al mes".
Urquía recalcó que "se ha hecho la subida mínima, para mantener la recaudación, para que los servicios se vayan mejorando, y para pagar los servicios que se dan, como el agua, el alcantarillado o las basuras".
A todo ello sumó que "se están trabajando en aspectos nuevos, como una tasa que no va a suponer una gran cantidad de dinero, que es la ocupación de la vía pública por cajeros o máquinas expendedoras", con una previsión de pago de 37,76 euros al año. Además, apuntó que se estudia, más a largo plazo, una nueva ordenanza fiscal sobre telefonía móvil.
Explicó que "no sería sobre las antenas, sino que se dirigiría a las empresas distribuidoras, con un porcentaje sobre el consumo que tienen en la ciudad". Es una medida que, según afirmó, "ya se está poniendo en marcha en otras ciudades", a iniciativa de la Federación Española de Municipios y Provincial (FEMP).
"La línea que vamos a seguir es que los ciudadanos entiendan que hay que pagar los servicios, y que todo sube cada año", subrayó el concejal, quien alabó "el comportamiento ejemplar que tienen los ciudadanos de Logroño, con un porcentaje elevadísimo de recaudación voluntaria".
También resalcó Urquía las bonificaciones que se dan en los impuestos, entre las que recalcó que, en el caso del IBI, "hay bonificaciones fiscales por importe de más de un millón de euros, sobre todo en cuanto a VPO"; en el IAE, apuntó la bonificación, que supone 15.000 euros, por el inicio de una nueva actividad empresarial.
En vehículos, señaló las bonificaciones a los clásicos e históricos, y los 230.000 euros que suponen las bonificaciones para los minusválidos; y, en el ICO, los beneficios, de hasta un 30 por ciento, para el uso de energías renovables en la construcción o para obras en el Casco Antiguo. En total, las bonificaciones alcanzan 1,9 millones de euros.
Respecto a la prevista revisión catastral y su repercusión en el IBI, Urquía señaló que "es un trámite lento, que puede llevar 2 ó 3 años, y que se está estudiando, no se ha tomado ninguna decisión al respecto, y, si la hubiera, el efecto no sería recaudatorio, sino de igualdad, de corregir situaciones que han variado con el tiempo".
