LOGROÑO, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -
Arkaitz Goikoetxea, supuesto cabecilla del desarticulado 'complejo Vizcaya', acaba de abandonar, escoltado por varios agentes y con la cara descubierta, el piso que las Fuerzas de Seguridad del Estado han registrado desde las 9 horas en Logroño.
El piso, en el barrio de El Arco de Logroño, se ha registrado por la sospecha de que allí vivió la etarra Olga Comes, detenida en Francia. Los agentes han abandonado ya el lugar, por lo que el registro puede darse por concluido.
Junto con el detenido, los agentes y técnicos del TEDAX han extraído varias maletas y bolsas con los efectos hallados en el interior del piso, que han introducido en uno de los coches de la Guardia Civil.
El etarra ha salido por la puerta principal, desde donde varios vecinos que seguían atentos el desarrollo de los hechos le han insultado.
El jefe del Comando Vizcaya Arkaitz Goikoetxea ha estado presente desde las 10.30 horas en el registro, que comenzó a las 9 horas de esta mañana y se está realizando por orden del juzgado número 6 de la Audiencia Nacional, de guardia, en sustitución del número 5 que dirige Baltasar Garzón. Además de los TEDAX, ha participado también la Unidad Canina de la Guardia Civil.
Olga Comes Arambillet, 'Txikitxe', de 40 años, ya aparecía en la documentación incautada en un chalet de Tarbes en diciembre de 2002 al que fuera jefe del aparato militar de ETA Ibon Fernández Iradi, 'Susper', como susceptible de ser captada para la organización terrorista, según informaron a Europa Press fuentes de la investigación.
Su pista se retoma con la desarticulación del 'comando Vizcaya', para el que actuó como 'liberada' desde principios de 2007 y hasta abril de este año, cuando cruzó la frontera para incorporarse a la estructura de ETA en Francia, un mes antes de que el piso de Logroño fuera puesto, de nuevo, en alquiler después de que lo ocupara.
Durante su etapa en el País Vasco era responsable del 'complejo Vizcaya' junto a Arkaitz Goikoetxea y Jurden Martitegi. Los tres realizaron los seguimientos al concejal del PSE en Eibar Benjamín Atutxa hasta que desistieron de secuestrarle y asesinarle porque llevaba escolta.
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