LOGROÑO, 29 Ene. (EUROPA PRESS) - Con las primeras denuncias, los investigadores intentaron determinar la existencia de alguna relación entre las víctimas que pudiera llevar a la identificación del autor, dado que en la mayoría de los casos estos daños suelen tener una motivación basada en la venganza o en represalia. Sin embargo, ante la existencia de más víctimas y al no existir nexo de unión entre ellas, salvo el lugar donde se encontraban estacionados los vehículos, se cambió la línea de investigación, pensando que podría ser una persona que acudía asiduamente al centro comercial y que eligiera los coches de forma "aleatoria". La Policía ha detallado que este tipo de hechos "se caracterizan por ser muy fáciles de realizar sin ser visto o detectado, por lo que resulta sumamente complicado su investigación, obtención de pruebas y en consecuencia su resolución". Así, "simplemente hay que pasar andando al lado de los vehículos, sin necesidad de hacer gestos raros o de ralentizar el paso, para causar daños importantes en el vehículo". Ha añadido que esto, "unido también a la falta de testigos presenciales, cosa de la que ya se preocupan los autores, llevó a que se tuviera que proceder a un visionado muy pormenorizado de las grabaciones realizadas por las cámaras de seguridad del centro comercial". Ante su extraño comportamiento, el visionado se centró en esta persona, situándolo en el Centro Comercial en los distintos días que se produjeron los daños en los vehículos y consiguiendo, además, demostrar que dicha persona había estado o pasado por todos los vehículo afectados, sin estar de camino entre su vehículo y la entrada normal al centro comercial. Las actuaciones practicadas fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Logroño.