Archivo - Sillas recogidas en la terraza de un establecimiento de Logroño, La Rioja (España), a 30 de octubre de 2020 - Alberto Ruiz - Europa Press - Archivo
LOGROÑO, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
La reciente decisión del Consejo de Gobierno de La Rioja situando a La Rioja en el nivel 4 del Plan de Medidas según Indicadores (semáforo) supone "un retroceso que no está justificado e implica incluir a todos los municipios riojanos en el mismo saco, a pesar de la evolución positiva de Logroño y de otras comarcas y municipios riojanos, que suponen un 75 por ciento de la población", ha señalado Hostelería Riojana de la FER en un comunicado.
La conclusión de esta nueva decisión del Gobierno de La Rioja es que "el sector hostelero continúan criminalizado como el principal culpable de los casos activos de contagio, lo que se ha demostrado por activa y por pasiva que no es cierto".
El "verdadero problema, como han reconocido las propias autoridades sanitarias, se encuentra en las reuniones privadas de amigos y familiares en domicilios particulares, locales y merenderos, que no tienen ningún tipo de seguridad ni control".
A pesar de que los casos de covid en la capital riojana y en otros muchos pueblos riojanos "no han evolucionado negativamente, el Gobierno aplica un nivel más restrictivo, que obliga a la hostelería a pasar del 50 por ciento al 30 por ciento en interiores, lo que es una decisión injustificada y que no responde a la prometida gestión por municipios que se iba a realizar de esta crisis sanitaria".
Incluir a toda La Rioja en el nivel 4 "no tiene mucho sentido cuando otras importantes ciudades riojanas, como Calahorra, Alfaro o Nájera se encuentra en el nivel 5 y otros municipios como Cervera de Río Alhama en el nivel 6".
Hostelería Riojana de la FER "reclama a las autoridades sanitarias una gestión más transparente y clarificadora que limite o restrinja las actividades en función de la situación de cada municipio, sin incluir a los 174 municipios riojanos en un mismo paquete".
En el caso del sector hostelero, además, se produce "un importante quebranto económico para muchos establecimientos que este próximo fin de semana tenía reservas y que lamentablemente van a tener que eliminar, con el daño económico que esto supone, agravando más la compleja situación del sector".
Hostelería Riojana de la FER solicita al Gobierno de La Rioja que "reconsidere su decisión lo antes posible y que no continué dañando sin criterios objetivos a un sector que está intentando mantener su actividad y el empleo contra viento y marea".