Comisión de Sostenibilidad y Transición Ecológica bajo la presidenta del portavoz de Ciudadanos, Pablo Baena - CIUDADANOS
LOGROÑO, 30 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Comisión de Sostenibilidad y Transición Ecológica del Parlamento de La Rioja se ha reunido hoy para culminar los trabajos que los diputados han desarrollado en ponencia. Se ha aprobado el texto que irá a pleno con la abstención del Partido Popular.
El Ejecutivo riojano aprobó, en Consejo de Gobierno, el proyecto de Ley de Caza y Gestión Cinegética de La Rioja que, posteriormente, se envió al Parlamento para que siguiera su trámite hasta convertirse en Ley y sustituir a la actual Ley de Caza, vigente desde 1998.
Hoy, la Cámara ha culminado el trámite parlamentario anterior a su aprobación en pleno, previo paso por el Consejo Consultivo, con la defensa de las enmiendas aún vivas del Grupo Popular y Ciudadanos en una comisión presidida por el portavoz de Ciudadanos, Pablo Baena, que actuará como relator en el momento que llegue a pleno.
La diputada del PP, Noemí Manzanos, ha parafraseado a Alfonso Guerra para afirmar que, tras el trabajo en ponencia, incluyendo la escucha a expertos, se va a lograr que a la ley "no la conozca ni la madre que la parió", tras el "mal texto" del Gobierno de La Rioja.
Ha insistido en la necesidad de dar "una vuelta" a las enmiendas que se debatirán en pleno, subrayando la necesidad de "convertir al conejo y al jabalí en una plaga" y advirtiendo de que, si no se hace así en esta ley, la modificará el PP cuando llegue al Gobierno en la próxima legislatura.
La diputada de IU Henar Moreno ha valorado el esfuerzo en llegar a acuerdos, y ha advertido a Manzanos de que no tiene "el monopolio de lo que los riojanos necesitan".
La socialista Ana Belén López Montaña se ha mostrado decepcionada por las declaraciones de Manzanos considerando su discurso "anticuado", y creyendo que la ley actual "deja mejor la situación de la caza" y reprochando que los gobiernos del PP "no hicieron nada por mejorar la ley del 98".
PROYECTO DE LEY DE CAZA
En su exposición de motivos, se indica que la caza ordenada y racional supone hoy una función social innegable que sin ánimo de ser exhaustivos supone la reducción y minimización de los daños a la agricultura.
También, la contribución a una circulación más segura por la red de carreteras al reducir el tamaño de poblaciones de ungulados, especialmente de especies como el jabalí o el corzo; y la mitigación de los daños a la cubierta vegetal.
Asimismo, la generación y diversificación de las rentas locales en zonas deprimidas económicamente; se fija población y se contribuye al bienestar social; y la disminución de los riesgos sanitarios contribuyendo a la sanidad animal de especies domésticas al contener y reducir las poblaciones de especies cinegéticas y los vectores de transmisión.