LOGROÑO, 9 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los conocidos como 'Payasos Justicieros', nombre con el que según la policía se jactaban de sus delitos, han negado su culpabilidad y han rechazado lo declarado ante la policía. Además, una de las acusadas ha culpado a su expareja y ha asegurado que escribió conversaciones con su móvil porque tenía "hasta la huella".
En la vista oral celebrada hoy, la primera de las quince que se espera, las defensas han pedido la libre absolución y, además, han solicitado la nulidad de todas las actuaciones al entender que no debían haberse intervenido sus comunicaciones y que, además, el haber declarado todos en comisaría con el mismo abogado contaminó el proceso.
Después ha llegado el turno de los acusados que, para empezar, han negado lo dicho en comisaría. Uno de los acusados, D.L, ha dicho que quiso proteger a su novia y ésta, que le culpa a él de todo y dice que sólo estaba presente porque él le obligaba a estar a su lado, ha dicho que llevaba tres días sin comer ni dormir y no sabía ni lo que decía.
Un tercer acusado, I.A, ha llegado a decir que declaró bajo "coacción". Su novia en ese momento, N.M, ha dicho: "Yo no tenía ningún tipo de conocimiento de lo que hacían los tres juntos" y también ha dicho que dijo lo que dijo ante la policía porque se sintió "presionada por los agentes".
El primero en declarar hoy en el juicio ha sido D.L. Sólo ha querido contestar a su abogado y, ante él, ha dicho que con el otro acusado, I.A, se veía "de forma puntual" en el entorno del Palacio de los deportes; y a N.M porque era su novia de aquel.
Ha explicado que "apenas se metía en redes" y su novia, en cambio, sí estaba pendiente con el móvil. Ha negado participar en los incendios; y ha dicho que en una pelea que se le imputa fue la otra persona la que le partió la mandíbula "sin más".
Se le ha preguntado por un presunto incendio a un contenedor de basura de la calle Cigüeña de Logroño por supuesta venganza a la multa que le habían puesto a su novia, pero ha dicho no recordarlo. Ella, por su parte, más adelante ha dado otra versión. Ha dicho que, si bien la multa se la pusieron a ella por tener mal un tubo de escapa, fue él el que se enfadó y decidió prender fuego a colchones y unas maderas que, después, se propagó.
Ella ha relatado, también, que a continuación, D.L quemó una peluca en Villamediana y el fuego se extendió a unos sarmientos. La peluca, ha dicho, la usaba para que no le reconocieran. Y ha añadido: "Tenía hasta pistola y estaba buscando balas". ¿Por qué estaba ella con él? Ha defendido que le obligaba a estar juntos 24 horas y ella lo hacía por miedo incluso a lo que pudiera hacer a su familia. "Si no lo hacía me pegaba y me escupía", ha afirmado.
T.G llegó a pedir una orden de alejamiento y su exnovio ha contado que "intentaba entrar en contacto" con él estando vigente, de hecho, volvieron a estar juntos. Ella ha insistido que por miedo.
Ella ha relatado cómo, un día, estaba de paseo con D.L y él se encontró las llaves de un coche. Ha defendido que ella desconocía sus intenciones y que prendió el coche porque no había podido arrancarlo. "Me obligó a pasar por ahí", ha defendido.
Le ha acusado, también, de quemar una moto por celos; y cuando le han leído los mensajes que ella ponía en Instagram y en WhatsApp ha asegurado que los escribía él, porque tenía su contraseña y hasta su huella. Incluso le ha acusado de drogarse, a veces delante de ella.
Del número de móvil de T.G salió un mensaje con un emoticono ardiendo respondiendo a una invitación a drogarse: "Yo soy más sana y me divierto de otras maneras", decía el mensaje. Hoy ha dicho que no lo mandó ella, que fue él, porque le cogía el móvil, le obligaba a estar con él y llegó a cortarle los frenos del coche.
Ha reconocido que fue voluntariamente a declarar a la Policía, pero ha rechazado lo que dijo ese día: "Llevaba tres días sin dormir ni comer", ha dicho. De su exnovio ha dicho que "aún dentro de la cárcel" le hace "la vida imposible". Ante la estupefacción del abogado de él ha explicado que, al pasar por su módulo para ir al taller de cerámica, le espera en la puerta y ha tenido que hacerlo saber. El abogado ha supuesto que eso estará registrado.
Publicaciones en su Instagram con fotos de los dos besándose y declaraciones como "Amor te amo a ti y solamente a ti" las ha explicado como obligadas por parte de él. Y ha negado haber puesto en WhatsApp que no podía la multa porque vivía con sus padres.
Por su parte, I.A también ha respondido sólo a su letrado. "Para nada ratifico la declaración" ante la policía, ha dicho, añadiendo: "Al final fue bajo coacción yo creo". Su abogado le ha interrumpido: "Para intentar salvar el pellejo", y él ha asentido.
La última en intervenir, N.M, ha dicho que no conocía de nada a D.L y T.G; y de su exnovio, I.A, ha explicado que llevaban un mes y medio y rompieron al ser detenido. "Yo no tenía ningún tipo de conocimiento de lo que hacían los tres juntos", ha dicho.
No obstante, ha relatado cómo su exnovio quemó coches en un garaje después de coger una garrafa. Pero ha dicho que no tenía ni idea de que iba a hacer cuando entró con él. Incluso ha dicho que le recriminó lo que había hecho. ¿Por qué en la declaración se incluyó como culpable? Ha dicho que porque estaba muy nerviosa.
Ha contado que su exnovio encontró una mochila con unas llaves de coche, y ella le dijo que las dejara, pero empezó a probar en coches y... no recuerda si fueron a una gasolinera. En ese momento I.A ha protestado desde su asiento y la jueza le ha llamado al orden.
Después fueron al monte y ella ha explicado que, en un momento determinado, se marchó "por miedo".
"Es que no entiendo", ha dicho la fiscal, "fue a un garaje sin saber que iban a quemar coches y a los pocos días le acompaña a robar un coche que acabó siendo quemado". "Es que no vi ni que lo quemaba", ha dicho ella.
En la Policía, ha dicho: "Estaba nerviosa, declaré mal y me sentí presionada por los agentes". Y en el juzgado, en primera instancia, ha añadido, también. La jueza ha querido saber "quién le presionó en el juzgado" y ella ha replicado: "Estaba muy nerviosa".