Archivo - Imagen de la calle Sagasta de Logroño - EUROPA PRESS - Archivo
LOGROÑO, 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
La calle Sagasta de Logroño mantendrá la doble circulación y las aceras, bordillos y red de saneamiento, contando para ello con un nuevo proyecto que está elaborando en Ayuntamiento, que podría empezarse antes de final de año y que será, como ha adelantado este martes el alcalde Conrado Escobar, "más económico" y hablado con "todos los afectados", vecinos, comerciantes y hosteleros.
En una comparecencia ante los medios junto con el concejal de Urbanismo, Javier Martínez Mancho, Escobar ha recordado que la intervención en la calle Sagasta está contratada desde el pasado mes de enero, si bien el 22 de junio "la empresa adjudicataria remitió un escrito al Ayuntamiento para resolver el contrato, debido al retraso en el inicio de las obras".
Una circunstancia, ha relatado el primer edil, que se ha aprovechado para resolver el contrato "por desistimiento de la propia empresa", algo que "rompe el vínculo con la empresa, y libera al Ayuntamiento" para llevar adelante otro tipo de actuaciones, que ya antes, en una reunión con los afectados del entorno, ya se habían explorado.
"La primera sorpresa que nos encontramos -ha señalado Escobar- es que no conocían al detalle lo que se iba a hacer, su grado de conocimiento no era mucho, solamente se habían compartido intenciones". Ha incidido el alcalde en que el proyecto se adjudicó en enero de 2023 por 1,16 millones de euros, con una financiación europea de entorno al 50 por ciento del total.
Frente a esta situación, desde el nuevo Gobierno municipal, "partíamos de cuatro premisas: contrastar adecuadamente el sentir de todos los afectados; conocer al detalle los pormenores técnicos del proyecto; medir el impacto de la intervención no solo en la zona sino en toda la ciudad, ya que es una arteria capital; y un principio de responsabilidad económica y presupuestaria".
Sobre estas cuatro "variables", se constató que el proyecto planteaba "una plataforma única, levantando pavimento y aceras, con nueva pavimentación y con nuevo planteamiento de sumideros y abastecimiento, que quedarían en los laterales, no se llevarían al centro como estaba previsto".
A ello, ha proseguido Escobar, se une que Sagasta "está considerada una calle principal, de conexión norte-sur, del Campillo, Rioja Alavesa, Navarra y, especialmente, para el Casco Antiguo, una 'isla peatonal' entre la propia calle y Avenida de Navarra, por lo que si se suprime ese fluj, se dificulta mucho la circulación".
Una situación en la que ha destacado también la posición del Mercado de San Blas "cuyo funcionamiento depende en buena medida de la circulación de mercancías". Además, ha reseñado que "se ha analizado igualmente el material, que se ha comprobado que es de calidad y que funciona bien, está en perfecto estado".
Contando con todas estas premisas, "la propuesta de este equipo de Gobierno es desistir del proyecto, de conformidad con la empresa, y sustituirlo por otra intervención, más económica, que mentiene la calzada con circulación de doble sentido, así como las aceras, los bordillos y la red de saneamiento".
Ha unido la mejora de las intersecciones, con Portales, con Ruavieja y con la calle Mayor; y la mejora de todo lo que esté deteriorado en aceras y asfaltado. "Contando ya con el desistimiento de la empresa, las unidades municipales correspondientes están recomponiendo el poryecto para que se pueda aprovechar en los posible la financiación europea, porque no se trata de echar todo por la borda", ha asegurado el alcalde.
AYUDAS UE.
Sin embargo, Escobar ha sido contundente sobre el tema de las ayudas de la UE porque, aunque ha reseñado que la propuesta del Gobierno local es "de menor cantidad que lo que tendría que poner el Ayuntamiento en el otro proyecto, incluso con la financiación europea", "el objetivo no es un expediente que quede bien para Bruselas, sino para que mejore Logroño, que el proyecto sea ventajoso para la ciudad".
Como ha recalcado Javier Martínez Mancho, "se trata de conseguir un proyecto no conflictivo para la zona, que mantenga la comunicación norte-sur y con el Casco Antiguo, logrando además el equilibrio entre inversiones, inconvenientes de la obrs y los beneficios finales del proyecto".
Ha especificado que, en su parte inicial, partiendo del Espolón y hasta Portales, la calle Sagasta "tiene aceras de granito rosa con bordillos espectaculares, que han funcionado perfectamente", con aceras de 3 metros y una sección de la vía de 14 metros en total.
Pero, en el punto de menor anchura, la calle tiene 9 metros y aceras de 1,5 metros, "zonas en las que una plataforma única supondría un problema, con sensación de poca seguridad salvo si se pusieran muchos bolardos, lo que no tendría sentido".
También ha repasado la situación a los dos lados de la calle Sagasta, hacia Avenida de Navarra o hacia el Revellín, con tratamiento peatonal en ambas partes, lo que supondría que, restringiendo Sagasta, el flujo se haría más complicado "y tendría un tratamiento peatonal que no aportaría nada a las calles colindantes peatonalizadas".
El edil de Urbanismo ha añadido, a todo ello además, problemas con la carga y descarga o con las canalizaciones si se colocaran en el centro de la calle. "No se trata de destruir lo que funciona, pero sí se puede mejorar", ha dicho Martínez Mancho, quien ha señalado, igualmente, que, con la nueva intervención también se ahorrarían afecciones en la zona durante meses.
REVISAR "TODOS" LOS PROYECTOS.
Es el primero de los proyectos de la anterior Legislatura que se modifica, pero, como ha avanzado Conrado Escobar, "no va a ser el único, todos, no algunos, todos los proyectos que estaban en curso, y que han provocado controversia van a ser objeto de revisión, partiendo de la escucha, la revisión técnica, el impacto en la ciudad y la financiación".
De este modo, ha adelantado que el siguiente proyecto que se analizará con los afectados del entorno será el de la calle Duquesa de la Victoria, y que también están en cartera los de Avenida de Portugal y San Antón, "tenemos ya un calendario fijado y que se está siguiendo, con las unidades implicadas en lo técnico y en lo social para lograr el menor impacto y la mayor mejora".