Actualizado 16/10/2008 18:12

La Cámara anima a las empresas madrileñas a aplicar buenas prácticas para un comercio responsable


MADRID 16 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Cámara de Madrid, en colaboración con la organización Iniciativas de Economía Alternativa y Solidaria, celebró esta mañana una jornada bajo el nombre "Comercialización responsable: factor de competitividad internacional" para informar tanto a multinacionales como a pymes madrileñas de la necesidad de introducir la Responsabilidad Social Empresarial en su cadena de suministro.

Y es que un estudio hecho público la semana pasada revela que el 52% de los consumidores españoles estarían dispuestos a pagar un 10% más por productos de empresas que se distinguieran por un marcado comportamiento responsable a nivel ambiental y social. La encuesta de la CECU (Confederación de Consumidores y Usuarios), también revela que el 27% de los consultados habían penalizado a alguna marca por su mal comportamiento.

"Las compañías conocen esta tendencia de los consumidores, por eso se plantean los aspectos de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) como parte fundamental de sus estrategias de negocio. Aquellas empresas que no estén implicadas activamente quedarán obsoletas y superadas por el entorno. Estamos hablando de supervivencia en el mercado, no de iniciativas voluntarias más o menos amables", explicó Carmen Verdera, de la Cámara de Comercio de Madrid, que también señaló otros aspectos positivos para el empresario, como mejorar la motivación y la fidelidad de los empleados, y generar credibilidad y confianza entre los consumidores.

En un mundo cada vez más globalizado y con mayor internacionalización del comercio, la deslocalización de la producción y la manufactura repercute en que la cadena de suministros de una empresa se oriente muchas veces hacia los países en vías de desarrollo, donde el coste de la producción es inferior, lo que constituye una atractiva ventaja competitiva.

El comercio justo es una alternativa sostenible de orden económico social capaz de rescatar al comercio global de sus desequilibrios y reorientar la estructura y valores de la economía internacional. Las empresas que hagan uso de esta práctica obtienen beneficios, por un lado, porque ofrecen a sus clientes productos de alta calidad social y ambiental, cada vez más demandados, y por otro lado, las empresas consiguen una imagen corporativa más positiva y comprometida con la sociedad.

Gran parte de los países desarrollados compran sus productos de países en vías de expansión. En el caso español, durante 2007 las importaciones procedieron, en gran medida, de los países del sudeste asiático. El 78,49% de las compras españolas realizadas en esta región llegaron de China.

España importó suministros energéticos de Asia central y de los países árabes, mientras que de América latina llegaron productos agrícolas, pescados y materias primas.

Los principales sectores de importación de las empresas españolas procedentes de países en vías de desarrollo son energéticos, de hábitat, productos agrícolas y de pescado, y moda. Algunos de ellos, son vulnerables a prácticas ilegales o abusivas por el tipo de producción que tienen, como la agricultura o la moda, donde las condiciones laborales habituales incluyen la explotación laboral, el trabajo infantil y forzoso, la ausencia de derechos laborales, etc.

A lo largo de la jornada se han expuesto herramientas para la inserción de la compra responsable en las empresas y ejemplos de buenas prácticas empresariales.

En la jornada participaron, junto a Carmen Verdera, Laura Rodríguez, coordinadora del programa de compra pública ética de IDEAS; Sofía Fernández de Mesa, directora de Reputación y Responsabilidad Social Empresarial de Telefónica; Pablo Cabrera, director de la Asociación del Sello Fairtrade; Félix Romero, responsable del programa de Bosques WWF-Adena; Mónica Aparicio, representante del departamento de comercio justo de Setem Madrid; Xavier Carbonell, director de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) de Mango; Miguel Ángel Martínez, director de la Asociación Semilla; Jaime Manteca, coordinador de proyectos de Copade y David Comet, responsable del programa de Compra Empresarial Responsable de IDEAS.

Los asistentes también han recibido de forma gratuita el manual "La compra responsable en países en vías de desarrollo: la responsabilidad del comprador en la cadena de suministro", una herramienta práctica para que las empresas puedan tener un marco de referencia con el que desarrollar sus actividades en estos mercados.

La globalización de los mercados afecta a países y sociedades distintas entre sí, con diferentes grados de vulnerabilidad, por lo que es necesario que las propias empresas asuman un compromiso, adoptando valores y pautas de compra responsable que tengan impactos positivos en sus proveedores.

Consciente de la importancia de la aplicación de la Responsabilidad Social en las empresas, la Cámara de Comercio de Madrid, ha creado un área específica de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) para ayudar a las pequeñas y medianas empresas de la región a alcanzar la excelencia en su gestión.

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