ALCOBENDAS, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -
Cerca de 32.000 voluntarios de la Comunidad de Madrid superan los 65 años, lo que presentan el 21 por ciento de los 150.000 que existen en toda la región, según ha anunciado el consejero de Asuntos Sociales, Salvador Victoria, durante su visita a la residencia Gastón Baquero de Alcobendas.
El consejero ha estado acompañado por el alcalde de Alcobendas, Ignacio García de Vinuesa. Allí han mantenido un encuentro con un grupo de voluntarios de la entidad social Desarrollo y Asistencia que acuden a este centro para acompañar a los residentes y ocupar las horas libres que estos tienen con actividades que les ayuden a superar la soledad que en algunos casos tienen.
El responsable regional ha destacado la cifra de voluntarios mayores, "lo que pone de manifiesto que la actividad de voluntariado no es algo exclusivo de jóvenes universitarios sino que es una opción que no entiende ni de edades ni de género".
"Prueba de ello es el grupo de voluntarios que hoy ha tenido la amabilidad de encontrarse conmigo para intercambiar impresiones. Tenemos el ejemplo de Amelia Mezquida, una mujer trabajadora y con hijos que, pese a los problemas de agenda que me imagino ha de tener, encuentra un hueco para venir a esta residencia a compartir parte de su tiempo con personas que lo necesitan. O el de Fernando Jorqueda, que con 80 años transmite su optimismo y sus ganas de vivir a usuarios que, quizá con su misma edad, se sientan más tristes", ha explicado.
Amalia y Fernando forman parte de un programa de voluntariado que la Consejería de Asuntos Sociales tiene en marcha en colaboración con distintas entidades de participación voluntaria, como 'Desarrollo y Asistencia', 'Volan' o 'Amigos de los Mayores', para impulsar proyectos altruistas en residencia de la Comunidad. En la actualidad, estas labores se llevan a cabo en quince centros públicos de la región y está previsto que se extienda próximamente a otros.
En total, el número de personas que participan en iniciativas de solidarias en residencias asciende a 300 distribuidas en quince proyectos. Se trata de ciudadanos con perfiles diferentes, aunque el mayoritario es el de mujeres u hombres jubilados, debido a que las actividades con usuarios de residencias de mayores se concentran en gran parte por las mañanas, que es cuando este tipo de voluntarios dispone de más tiempo disponible.
Según explicó Victoria, el voluntariado de personas mayores es un fenómeno que se viene experimentando en los últimos años ante el cambio que se aprecia en el perfil de la persona jubilada.
"Frente a lo que ocurría hace apenas unas décadas, ahora la jubilación no significa la renuncia a la vida activa y a la participación social, sino que nuestros mayores perciben esta nueva etapa en sus vidas como una oportunidad para aprovechar la experiencia y conocimientos adquiridos para emprender nuevos proyectos vitales, como puede ser ayudar a otras personas", ha añadido el consejero.
El perfil del voluntariado madrileño se caracteriza por un elevado grado de feminización (el 73 por ciento de las personas voluntarias son mujeres), el predominio de las personas jóvenes (el 24 por ciento tienen entre 19 y 25 años y el 26 por ciento, entre 26 y 40 años), por poseer un elevado nivel educativo (el 36 por ciento tiene estudios universitarios, de grado medio o superior), mientras que la ocupación dominante es la de ama de casa (el 42 por ciento). La mayor parte de personas que dedican parte de su tiempo a ayudar a otros emplean entre 5 y 9 horas semanales.
