MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
Asociaciones antifascistas anunciaron hoy que se concentrarán este sábado en la Puerta del Sol contra el "continuado ascenso" de las agresiones fascistas en la región, a pesar de que la Delegación del Gobierno de Madrid no les ha concedido el permiso para ello, informaron hoy los convocantes.
Los distintos colectivos y asociaciones antifascistas, que tenían previsto una concurrencia de 500 personas, solicitaron concentrarse con carácter de urgencia también en solidaridad con los últimos asesinatos y agresiones con tintes racistas, xenófobos y ultraderechistas.
La Delegación del Gobierno considera que no hay motivos para la urgencia e indican a los convocantes que pueden solicitar otra fecha, "comunicándola dentro de los plazos previstos pro la Ley". Además de que la convocatoria no se formuló en plaza, coincide con otra registrada previamente de la Federación madrileña de asociaciones Pro Salud Mental el sábado de 11 a 14 horas, con una participación estimada de 5.000 personas.
"Está claro que les molesta que aparezca en la calle una izquierda comprometida, organizada, que denuncie y luche contra el fascismo desde una visión anticapitalista. Por eso queremos aclarar que mantenemos la convocatoria de la concentración, con más razones si cabe, porque no podemos permitir que se silencien las agresiones fascistas con excusas estériles. Ya se prohibió el pasado 16 de enero una movilización en Tribunal para denunciar un apuñalamiento neonazi y de nuevo vuelven a hacerlo, mientras los fascistas gozan de impunidad", indicaron los anfifascistas.
LA CONVOCATORIA
La concentración fue convocada hace unos días por la Asociación de Víctimas de Violencia Fascista, Racista y Homófoba, que preside la madre del joven asesinado en el metro de Legazpi Carlos Palomino, así como otras organizaciones antifascistas y antirracistas.
Entre otras, citaron el asesinato del trabajador de origen rumano Giovanni Musat en el municipio madrileño de La Cabrera, "tras el cual subyacen, según los propios vecinos, motivaciones racistas y xenófobas"; o la agresión sufrida por Rafael Santamaría, indigente que trataba de encontrar un lugar donde pasar la noche "cuando fue sorprendido por un grupo de neonazis que le propinaron una paliza". Consecuencia de ella, el hombre pasó 10 días en estado comatoso con lesiones neuronales de grave consideración, resultado de las cuales ha perdido la capacidad del habla.
Por otro lado, recordaron el caso de Alfredo Albino, guineano miembro de la Federación Panafricanista de España, "asaltado por un grupo de neonazis que ni tan siquiera fue identificado por el dispositivo policial que acudió al lugar de los hechos, limitándose cínicamente a pedir los papeles al agredido".
Asimismo, los convocantes destacaron el apuñalamiento de un joven antifascista de 16 años en las fiestas de Majadahonda; el ataque contra un pequeño grupo de jóvenes durante las fiestas de Alcorcón, armados con porras extensibles y una pistola de perdigones.
"A la vista queda que los objetivos de las agresiones y amenazas por parte de estos individuos siguen siendo, por una parte, aquellos sectores de la sociedad que se encuentran en mayor estado de indefensión, como trabajadores inmigrantes o indigentes, y por otra parte, a aquellos que dan el paso y adquieren la firme convicción de luchar contra el fascismo y el racismo", indicaron.
Así, las asociaciones antifascistas consideran que las localidades y distritos más adinerados de Madrid son actualmente y por norma general, "auténticos focos de actividad neonazi". Por otro lado, criticaron la actuación "claramente racista" de muchos de los controles policiales "destinados a la detención para repatriación de los trabajadores inmigrantes 'sin papeles', los cuales son tratados comúnmente "de forma vejatoria".
