MADRID 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
El delegado de Hacienda en el Ayuntamiento de Madrid, Juan Bravo, aseveró hoy en el Pleno ordinario del mes que la "voluntad" del Gobierno municipal es que la nueva ponencia de valores catastrales "no impacte negativamente" en los bolsillos de los madrileños, según se incluía en el Plan de Saneamiento que elaboró el Gobierno local.
Todo ello después de que el portavoz socialista en el Ayuntamiento de la capital, David Lucas, afirmara el pasado fin de semana que el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, "miente" cuando dice que aplicará la congelación impositiva porque, por ejemplo, el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) "subirá un 35 por ciento en los próximos años".
El socialista explicó que el Plan de Saneamiento Económico del Ayuntamiento de Madrid contradice la pretendida congelación impositiva ya que incluye para 2010 un crecimiento del IBI en un 9,5 por ciento por el incremento del valor catastral, que se revisa todos los años. Lucas abogó por una congelación real con una reducción de los tipos impositivos, algo que no acometerá el Gobierno municipal en el próximo ejercicio.
Bravo recordó que en 2012 se cumplen diez años de la Ponencia de Valores, por lo que el Ayuntamiento de Madrid está "obligado a la revisión" pero añadió que espera que el nuevo modelo de financiación local previsto para 2011, "como se ha comprometido el Gobierno de la Nación", modifique la articulación del IBI. El edil de Hacienda recordó asimismo que la voluntad del Gobierno municipal en referencia al Plan de Saneamiento es que la nueva ponencia de valores catastrales no tuviera impacto en la nueva Tasa de Basuras.