La capital sufrirá una desaceleración económica de casi un punto este año, tras crecer un 3,9% en 2007, según un estudio

MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Producto Interior Bruto (PIB) aumentó en 2007 en la ciudad de Madrid un 3,9 por ciento, pero se espera un recorte de casi un punto este año, hasta limitarse a un 2,8 por ciento, una cadencia que continuará en 2009 hasta dejar el crecimiento en un 2,3 por ciento, según datos aportados hoy por un estudio del Ayuntamiento de Madrid.

El delegado de Economía del Consistorio madrileño, Miguel Ángel Villanueva, señaló que la capital no escapa de la situación mundial y europea de ralentización de la actividad económica. En este aspecto, declaró que la industria experimentó un aumento del 2,3 por ciento y la construcción un 1,9 por ciento.

"El proceso de desaceleración económica lleva a un mayor número de parados. El peso de la construcción en Madrid es menor en proporción que el resto de España y tenemos un colchón mejor. En la capital lo que nos está afectando más es la repercusión en el sector financiero y bursátil", añadió.

Este Barómetro realizado por el Ayuntamiento y la Universidad Autónoma de Madrid hecho público hoy rebaja las previsiones efectuadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI) para la economía española. Así, indica que el PIB español subirá en 2008 tres décimas menos de lo previsto, hasta alcanzar el 2,7 por ciento y un 2,3 en 2009. "Madrid, como centro económico de la nación, no puede escapar a esta tendencia. Se espera que crezca este año un 2,8 por ciento y se reduzca a un 2,3 el próximo año", añadió.

Respecto a la inflación, Villanueva apuntó que subió en 2007 en toda España un 4,2 por ciento y en un 4 en la Comunidad de Madrid, "debido, fundamentalmente, a un repunte en los precios de la energía y de los alimentos".

Para afrontar este panorama económico, el delegado propuso políticas económicas que liberalicen el mercado y un esfuerzo sobre la fiscalidad de las pequeñas y medianas empresas para que aumenten su productividad, "y no dar subvenciones ni pagas extraordinarias".

"Con políticas liberales aumenta la competencia y crece la economía. El superávit es un concepto económico que debería ir dirigido a fomentar la competitividad. Además, el IPC se ha disparado y la balanza comercial es negativa en España", especificó.

En esta línea, el edil apostó por fomentar, dentro de sus competencias, los recursos en los programas municipales 'Madrid Emprende' y la Agencia para el Empleo, "para que la brecha del paro no produzca una fractura social".

DATOS POSITIVOS

No obstante, Villanueva afirmó que el sector servicios, que supone más del 80 por ciento de la producción de la ciudad de Madrid, "mantiene un relativo nivel de actividad y un moderado crecimiento del empleo a pesar de la desaceleración de la economía a nivel mundial".

El Barómetro elaborado por el Ayuntamiento de la capital y referido al último trimestre de 2007 revela además "la buena salud" de la actividad turística, con un aumento el pasado año del 8,5 por ciento de los viajeros que la visitan, e igualmente el aeropuerto de Barajas, que batió récord de viajeros, con 51,7 millones, un 10,9 por ciento más que en 2006.

Asimismo, el informe señala que se crea más empleo entre las mujeres que entre los hombres, con un descenso de la tasa de desempleo femenino de un 8,5 interanual en el último trimestre de 2007, "e igualmente desciende de manera importante la temporalidad en el trabajo, puesto que los contratos indefinidos suponen ya el 80,1 por ciento del total, once puntos más que a escala nacional".

EL "BLINDAJE" DE LA ALTA VELOCIDAD

El último número del Barómetro de Economía dedica un capítulo monográfico a la red ferroviaria de alta velocidad. El delegado municipal de de Economía manifestó que las líneas recientemente puestas en servicio y las que lo estarán en un futuro próximo, alcanzando Lisboa y la frontera francesa, "confirman a Madrid como uno de los tres núcleos ferroviarios de alta velocidad más importantes del mundo junto a Tokio y París".

"Con el desarrollo futuro previsto, Madrid se emparejará con Tokio como ciudad líder en conectividad por alta velocidad, siendo el nodo de una conurbación que alcanzará los 24,6 millones de habitantes y una dimensión laboral de 10,6 millones de empleos", subrayó.

Villanueva puso como ejemplo la línea Madrid-Barcelona para apostillar que si en 2007 entre avión y tren los viajes entre ambas ciudades alcanzaban la cifra de 5,5 millones, con la puesta en funcionamiento del AVE, y en apenas cuatro años, esta cifra se elevará hasta los 7 millones, la mayoría de ellos en tren.

"El tren contribuye firmemente a la sostenibilidad al reducir significativamente las emisiones de dióxido de carbono. Las estimaciones apuntan a que la alta velocidad puede implicar un descenso aproximado del 16 por ciento al año del total del gasto energético necesario en los viajes entre Madrid y el resto de España. Solamente contabilizando el recorrido Madrid-Barcelona, y ya en 2011, se emitirán 205.000 toneladas menos de dióxido de carbono", añadió.

CIUDAD 'SOLIDARIA' Y MENOS ENVEJECIDA

Según el barómetro, en la capital se concentra el 75 por ciento de las organizaciones no gubernamentales para el desarrollo (ONGD) registradas en España. Villanueva recalcó que sólo las de Madrid gestionan presupuestos por valor de 926 millones de euros, de los cuales menos del 40% proviene de fondos públicos. Además, en ellas trabajan más de 255.000 personas, de las que el 94 por ciento son voluntaria, que se dedican a programas hacia el exterior, especialmente hacia Iberoamérica, que recibe casi dos terceras partes de los fondos, siguiéndole en importancia África con el 24 por ciento.

En este sentido, el concejal de Economía aseguró que el Ayuntamiento de Madrid canalizó en 2006 ayudas a entidades sin ánimo de lucro por un valor de más de 20,5 millones de euros, subvencionando a 433 entidades y 423 proyectos.

El barómetro de la Economía de la ciudad dedica otro capítulo al estudio de la población de mayor edad desde el punto de vista de la dimensión territorial. Así, explicó que, a pesar de que el centro de la ciudad está más envejecido que los distritos periféricos, la estructura de poblacional está cambiando, y se reduce la tendencia al envejecimiento de la población de Madrid, ya que la población de 65 o más años representaba en 2001 el 19,5 por ciento del total y en 2007 el 18,8.