Cifuentes defiende la detención del bombero porque "lo raro es darle trato de favor tras agredir a un agente"

Cristina Cifuentes, delegada de Gobierno en Madrid
RAFA HERRERO
Actualizado: jueves, 16 enero 2014 14:34

MADRID, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -

La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha defendido hoy la detención anoche de un bombero del Ayuntamiento de Madrid porque "lo raro hubiera sido hacer un trato de favor tras agredir a un agente" durante los disturbios producidos tras manifestación desarrollada por el centro de Madrid en apoyo a los vecinos del barrio burgalés de Gamonal.

"Cuando se produce una agresión a una policía, venga de parte de un electricista, un registrador de la propiedad, una diputada, un ama de casa o de una persona uniformada como un bombero, el consecuencia tiene que ser la misma. Lo raro es que se hubiera dado trato de favor", ha indicado Cifuentes en la rueda de prensa ofrecida este mediodía para hacer balance de sus daños en su cargo.

La representante del Gobierno en Madrid ha explicado que la manifestación de ayer, que empezó en una concentración en Sol no comunicada a la Delegación y "por tanto, ilegal", fue en un principio pacífica, "y no tenía por qué haber provocado ningún problema, salvo las responsabilidades administrativas a los organizadores que marca la Ley".

TÁCTICAS DE "GUERRILLA URBANA"

Así, ha detallado que tuvo una afluencia de unas 500 personas y luego fue incrementándose hasta llegar a unos 1.500 en el momento de mayor auge. Se desarrolló de una manera pacífica hasta casi al final, en los aledaños de Génova, donde se produjeron incidentes por parte de algunas personas, grupos reducidos que comenzaron a lanzar cascotes, botellas y petardos.

"Hay una estrategia de grupos de cinco o seis personas que se disgregan provocando incidentes, quemando contenedores, rompiendo mobiliario urbano y cristales, destrozando entidades bancarias y cajeros, tácticas habituales de guerrilla urbana. La Policía hizo un magnífico trabajo y pudo controlar en un tiempo razonable lo que pasaba. Lo pudieron desactivar por completo", ha explicado.

Como consecuencia de ello, y de las cargas policiales hubo 11 personas que tuvieron que ser asistidas por el Samur, todas leves. Cinco fueron policías heridos con contusiones leves y seis manifestantes. Uno de ellos sufrió una crisis de ansiedad y otro una taquicardia, ninguna con una lesión importante.

El balance policial terminó con 14 personas detenidas, tres de ellas menores de edad. De los mayores, uno ha quedado en libertad con cargos, mientras que los otros diez serán interrogados por la Policía y pasarán a disposición judicial. Sólo tres cuentan con antecedentes por malos tratos, desórdenes públicos, resistencia y desobediencia a la autoridad y amenazas graves, dependiendo del caso, según han indicado a Europa Press fuentes policiales.

DETALLES DE LA DETENCIÓN DEL BOMBERO

Uno de los arrestados anoche fue un bombero del Ayuntamiento de Madrid. Según ha explicado Cifuentes, los hechos tuvieron lugar en la calle Bárbara de Braganza, donde había varios bomberos que estaban terminando de extinguir contenedores.

Entonces varios miembros de la Unidad de Intervención Policial (UIP) que tenían que pasar por allí para continuar con la actuación policial para detectar a los autores del incendio y evitar que prendieran más elementos del mobiliario urbano pidieron "por favor" a los bomberos que retiraran la manguera porque les impedía el paso.

Sin embargo, según ha relatado Cifuentes, el bombero se negó y se produjo uno rifirrafe dialéctico con un agente, "que entendía que se estaba obstaculizando su trabajo". "Entonces otro bombero fue hacia la Policía y le dio un cabezazo con el casco a uno de los subinspectores que estaban allí", ha relatado.

Este bombero fue detenido y un policía municipal le retiró de la mano un pico que portaba. Como consecuencia de esta agresión, este policía tuvo que recibir "asistencia sanitaria por contusión", ha resumido.

Según han indicado a Europa Press fuentes de la investigación, el bombero detenido anoche está involucrado en los sucesos ocurridos en noviembre de 2012 en el Centro Integrado de Seguridad y Emergencias de Madrid (CISEM), cuando dos centenares de bomberos intentaron bloquear las puertas como medida de presión para protestar por los recortes salariales.

Hasta el lugar se desplazaron los llamados 'antidisturbios' de la Policía Municipal (UCES) para evitar su entrada, lo que terminó en enfrentamientos violentos entre policías y bomberos y dos agentes heridos.

No obstante, la delegada del Gobierno en Madrid ha rehusado entrar en agravios entre el Cuerpo de Bomberos y el de la Policía Nacional. "Me parecería grave que alguien quiera hacer un enfrentamiento entre Cuerpos porque los bomberos y la Policía está para atender a los ciudadanos", ha apostillado.

Además, ha mostrado todo su "apoyo y respeto" a la labor "esencial" que hacen los Bomberos del Ayuntamiento y de la Comunidad de Madrid porque "sin su trabajo sería muy difícil que la ciudad volviera a la normalidad tras una manifestación de este tipo, en la que han tenido que apagar coches y contenedores quemados".