MADRID 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Comunidad de Madrid ha anunciado la creación, a través de la
Fundación Canal, de 'Rutas del Agua Multimedia', una aplicación móvil gratuita y disponible tanto para Android como Apple con la que se podrá explorar la biodiversidad y los ecosistemas fluviales de la región a través de contenidos digitales, según ha informado el Ejecutivo regional en un comunicado.
El objetivo principal pasa por que el usuario pueda llegar a conocer los entornos naturales utilizando recursos que incluyen información sobre la flora, la fauna o la historia del entorno a través de mapas interactivos con geolocalización en tiempo real, audios, grabaciones o realidad aumentada, entre otras herramientas.
El primer espacio disponible será El Pontón de la Oliva, una presa sobre el río Lozoya situada en la sierra de Ayllón y que destaca por su "significativo por su valor histórico, natural y arquitectónico". En el parking de la presa se ha instalado un cartel informativo donde brinda instrucciones para descargar la app y comenzar la ruta.
En la actualidad hay disponibles dos recorridos: uno lineal, que consta de tres kilómetros y medio, un desnivel de 120 metros y un tiempo estimado de dos horas; y otro circular que se extiende por ocho kilómetros, cuenta con un desnivel de 360 metros y está contemplado para realizarse en unas tres horas y media.
El Pontón de la Oliva actualmente está fuera de servicio y no forma parte de la red de abastecimiento del Canal de Isabel II, si bien es cierto que representa el primer intento de proporcionar agua de calidad a la ciudad de Madrid mediante embalses a mediados del siglo XIX. A día de hoy, su paisaje montañoso y boscoso lo convierte en un punto de interés para excursionistas y turistas.
Además, la infraestructura cobró protagonismo durante las intensas lluvias del pasado mes de marzo, que provocaron que hasta trece presas del Canal de Isabel II se vieran obligadas a desembalsar de manera controlada. El Pontón de la Oliva se llenó casi por completo al recibir agua de El Atazar, algo que tan solo ha ocurrido en tres ocasiones en este siglo.