MADRID, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las defensas del juicio por el asesinato del narco colombiano Leónidas Vargas el 8 de enero de 2009 han criticado que el cuestionario que conforma el objeto del veredicto constituye "una trampa retórica" al incluir en cada cuestión dos afirmaciones desfavorables para los procesados.
El tribunal de la Audiencia Provincial de Madrid presidido por el magistrado Carlos Ollero ha entregado esta mañana el objeto del veredicto a los miembros del Jurado Popular para que se pronuncien sobre la culpabilidad o inocencia de los acusados.
Fuentes jurídicas han indicado a Europa Press que los abogados se han quejado al presidente al plantear en cada pregunta dos afirmaciones con un contenido concreto, lo que a su juicio supone "una clara trampa retórica". "Hay varias frases que proponen dos afirmaciones y esto lo prohíbe la Ley", ha señalado un letrado a Europa Press.
Otra de las quejas presentadas se refiere a que el cuestionario se refiere sólo al relato de los hechos de la Fiscalía de Madrid, a pesar de que las defensas habían planteado unos hechos alternativos.
TESIS DEL FISCAL
En su alegato, el fiscal da por acreditado que los procesados se concertaron para quitar la vida al narcotraficante Leónidas Vargas, de 59 años, quien se encontraba bajo libertad de 200.000 euros por la Audiencia Nacional con motivo de su estado de salud. Vargas cumplía prisión por un delito de tráfico de estupefacientes como principal implicado en una red de narcotraficantes.
Así, José Jonathan F.O. y Edgar Andrés O.F. recibieron el encargo, por personas aún desconocidas, de matar a Leónidas Vargas. El capo se encontraba desde el 26 de diciembre de 2008 ingresado en el Hospital 12 de Octubre de la capital.
De este modo, contactaron con Alexander S.C., quien se encargaría de recoger al autor material y llevarlo al hospital, entregarle el arma y trasladarlo a su propia casa. Además, se pusieron en contacto con Jonathan M.R. para que vigilara la habitación 543 de la planta quinta, guiara al autor material hasta la misma y le entregara el arma.
Por otro lado, José Jonathan F.O. se puso en contacto con la acusada Yuli Carolina O.R., quien a su vez convenció al acusado Jonathan Andrés O., su expareja, para que a cambio de un precio ejecutara materialmente la muerte del capo.
El 8 de enero de 2008, Jonathan M.R. se dirigió a casa de Alexander S.C. y le facilitó un arma semiautomática. Sobre las 17 horas, Jonathan Andrés O. llegó al aeropuerto de Barajas procedente de Canarias y se fue a casa de Yuli Carolina O.R.
Así, Alexander S.C. recogió a Jonathan Andrés O., entregándole la pistola y llevándole al Hospital 12 de Octubre. En la entrada le esperaba José Jonathan F.O., Edgar Andrés O.F. y Jonathan M.R. Una vez allí, Jonathan M.R., cubierto con una gorra entró sobre las 19.37 horas en el hospital, seguido de Jonathan Andrés O., quien también llevaba una gorra y cubría la cara con una braga negra, a quien indicó la habitación en la que estaba ingresado Vargas.
Así, el asesino entró en la habitación sobre las 19.43 horas y tras preguntar al compañero quién era Leónidas, le disparó cinco tiros. Los tiros se dirigieron en zonas vitales, tres de ellos a quemarropa, uno en la barbilla, dos en el cuello y dos en el tórax, alcanzando ambos pulmones cuyas heridas provocaron la muerte de Vargas.
Por estos hechos, el fiscal solicita en su escrito de acusación que los siete acusados indemnicen de forma conjunta con 104.837 euros a la viuda de Leónidas Vargas.