Archivo - Entrada de los Juzgados de Plaza de Castilla. - Marta Fernández - Europa Press - Archivo
MADRID, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las dificultades para localizar a falsos sospechosos de la red de explotación infantil han obligado a retrasar hasta marzo las ruedas de reconocimientos previstas para esta semana, claves para activar la investigación judicial del polémico caso al figurar entre las víctimas cinco menores tuteladas por la Comunidad de Madrid, han informados fuentes jurídicas.
La trama de prostitución con menores se destapó el pasado mes de enero con la detención de 33 personas en el marco de la 'Operación Sana', ingresando ocho de ellos en prisión preventiva. Entre los arrestados figura el rapero Saymol Fyly, un conocido 'youtuber' que presuntamente captaba a las menores utilizando su música.
El rapero junto con otros miembros de la trama sexual, algunos de bandas latinas, las enganchaban al consumo de cocaína base para "venderlas a toxicómanos" en narcopisos y chabolas de Villaverde Alto, Usera y Vallecas.
El fiscal del caso solicitó hace unas semanas a la jueza que las víctimas de esta mafia declaren como prueba preconstituida con la finalidad de que su testimonio sea válido para el futuro juicio que se celebre.
La jueza, titular de Instrucción número 8 de Madrid, ha interrogado por ahora solo a los detenidos y tiene previsto tomar declaración a las menores, en cuyo caso la ley permite que su testimonio quede recogido como prueba antes de la apertura de juicio oral para evitar lo que se conoce en el argot judicial como 'doble victimización'.
Estaba previsto que este jueves arrancarán las ruedas de reconocimientos, pero esta diligencia de investigación se ha tenido que aplazar hasta el próximo 7 de marzo, según las mismas fuentes consultadas. El retraso se produce porque los falsos sospechosos no compartían rasgos similares a los detenidos, por lo que quedan desechados para poder lleva a cabo la diligencia.
Este reconocimiento visual por parte del testigo se realiza a través de un cristal unidireccional con cinco o seis ciudadanos parecidos, entre los cuales se coloca a un sospechoso. Si el testigo no le reconoce, sus posibilidades de salir absuelto aumentarán bastante.
ABUSOS SEXUALES
Según los investigadores, al menos diez menores habrían sufrido los abusos sexuales de esta red de prostitución infantil que operaba en Madrid, principalmente en el barrio de San Cristóbal de los Ángeles, en Villaverde.
Las chicas comparten lo que se conoce como el síndrome de las 'cadenas invisibles', propio de la explotación sexual de mujeres que consiste en la necesidad de permanecer junto a sus verdugos pese a no tener un impedimento físico que les impida romper con ese camino.
La edad de las víctimas, entre 13 y 18 años, y el hecho de pertenecer a familias desestructuradas refuerza esta dependencia, esta especia de 'síndrome de Estocolmo' común a todas ellas independiente de fugarse de su casa o de centros de menores (5 de ellas).
El sumario de la causa expone cómo las chicas eran enganchadas a la droga, principalmente al consumo de cocaína base, para después ser obligadas a prostituirse. Muchas se escapaban de los centros de menores y regresan con enfermedades de transmisión sexual.
"Todo ello sumado a la situación de falta de higiene, sueño y alimentación, con todo lo que ello conlleva", señalan las actuaciones judiciales.
Las jóvenes sienten "un miedo atroz" a muchos de los arrestados, entre ellos algunos miembros de la banda latina de los Dominican Don't Play y motivo por el que todas las víctimas están acogidas a programa de Testigos Protegidos.
"El terror generalizado por las circunstancias expuestas, unido al hecho de que los varones detenidos se mueven por el entorno de las bandas latinas, muchos de ellos con antecedentes violentos a sus espaldas, genera esas 'cadenas invisibles' que mantienen a las víctimas cercanas a las investigados", recogen las diligencias.