Ecolo Verdes reclama a Ana Botella la instalación de un medidor de radiactividad para la depuradora de la China

Actualizado: jueves, 3 marzo 2011 12:37

MADRID, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -

La plataforma electoral Ecolo Verdes ha reclamado este jueves a la delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, Ana Botella, la instalación de un medidor en la depuradora de La China para controlar "la contaminación radiactiva que sufre el agua de la capital desde hace décadas".

La formación ha aludido a unos documentos del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) en los que se señala que en los lodos y aguas de la depuradora, la más antigua de Madrid, se han detectados isótopos radiactivos de origen hospitalario y también de origen artificial, procedentes estos últimos del cementerio nuclear que hay bajo las instalaciones del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat), dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación.

Por ello, el candidato a la Alcaldía de Madrid por Ecolo Verdes, Ramón Linaza, ha exigido al Ayuntamiento la instalación de medidores geiger de radiactividad que permitan comprobar los niveles de estas instalaciones. "También esperamos que el alcalde, Alberto Ruiz Gallardón, cumpla su compromiso de poner en marcha un plan para el desmantelamiento de la depuradora", ha afirmado.

El pasado lunes, el partido ecologista también remitió al propio CSN una petición de información con mediciones actualizadas de residuos radioactivos de origen hospitalario u otro origen en la red de saneamiento de la ciudad de Madrid. De momento no se ha obtenido respuesta.

"La responsable municipal de Medio Ambiente no sólo se muestra incapaz de hacer frente a las amenazas medioambientales, sino que además las oculta, como ocurre también con la contaminación del aire. Ya que al PP le gustan tanto los toros, Ana Botella debería mostrar vergüenza torera y dimitir", ha añadido Linaza.

Ecolo Verdes ha señalado que varios centros hospitalarios vierten sus residuos radiactivos al alcantarillado público madrileño. Según han explicado, aunque estos isótopos son menos peligrosos que los de origen artificial, su actividad radiológica sólo desaparece por completo al cabo de 100 días. "Además, estos residuos deben llevar unas bajantes diferenciadas y almacenarse en un depósito especial, y no ser vertidos al alcantarillado", han precisado.

Pero para la formación ecologista la mayor amenaza detectada en la depuradora de la China, que da servicio a 11 distritos de Madrid, es la detección de Ce-137, "un isótopo radiactivo de origen artificial procedente de los vertidos del Ciemat".