MADRID, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid, Jesús Fermosel, ha afirmado este miércoles que con la aplicación de la jornada de 37,5 horas semanales a los trabajadores de los centros dependientes del Servicio Regional de Bienestar Social, su departamento pretende conseguir "más ahorro en las suplencias".
"Si hay un aumento de jornada eso se tiene que traducir en más ahorro en las suplencias", ha indicado el consejero tras visitar el 'stand' de voluntariado que ha instalado la Comunidad de Madrid en el Salón Internacional del Estudiante y de la Oferta Educativa (Aula) que se celebra en Ifema.
Con estas palabras el consejero ha hecho referencia a la serie de encierros que se ha producido en varias de las 24 Residencias de Mayores que gestiona el Gobierno regional en protesta por la aplicación de la nueva jornada laboral de 37,5 horas.
"Lo que no puede ser es que aumentando la jornada sigamos igual" ha señalado Fermosel, quien ha justificado la aplicación del aumento de la jornada laboral a los sábados para mejorar el servicio. A su juicio, aumentar la jornada laboral media hora más todos los días, como piden los sindicatos, es "tener durante media hora el doble de plantilla en el mismo sitio". Y para Fermosel esto no supone "ningún tipo de mejora de la atención".
"Lo que se está intentando pactar con los sindicatos es organizar esas dos horas y media semanales de todos y cada uno de los trabajadores del servicio regional para que se pueda mejorar la calidad de asistencia a los ancianos", ha explicado en referencia a las negociaciones de los agentes sociales con el Servicio Regional de Bienestar Social.
"Yo como médico ha trabajado muchos viernes, muchos sábados y muchos domingos pero desde que decidí serlo sabía que eso lo tenía que hacer", ha concluido.