"Fueron tres horas de infierno", dice la abogada de la víctima
MADRID, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -
La representante de la Fiscalía de Madrid ha rebajado de 16 a 9 años de prisión la solicitud de condena para un acusado de intentar estrangular a su mujer el 15 de mayo de 2010 en presencia de sus cuatro hijos y amenazar con tirar a uno de ellos por la ventana.
La rebaja de la pena se ha producido después de que el abogado del procesado, Ricardo M.F., la acusación particular y la fiscal alcanzaran un acuerdo de conformidad tras el reconocimiento de los hechos por parte del acusado. Tras el acuerdo, el procesado se ha limitado a reconocer los hechos ante el tribunal.
La abogada de la víctima ha indicado en los pasillos de la Audiencia de Madrid que el acuerdo se ha sustentado para evitar que la afectada y sus hijos tuvieran que revivir el infierno que pasaron durante tres horas.
"La único que quiero es que este hombre se olvide de la víctima y no vuelva a acercarse a ella ni a sus hijos", ha recalcado la letrada, quien ha aplaudido que se le imponga 15 años de alejamiento como medida cautelar.
Según la fiscal, el procesado llegó a las 8 horas el 15 de mayo de 2010, lo que provocó una discusión con su esposa. Con ánimo de acabar con su vida, según el fiscal, el procesado tiró a su mujer sobre la cama y se puso a estrangularla con un cinturón.
El procesado no consiguió el resultado, ya que una de las hijas de la pareja lo impidió tirándose encima de su padre y en presencia de sus hermanos, de 7, 4 y 2 años.
Asimismo, el acusado llamó a su hija "puta" y le propinó un puñetazo en la cabeza. Acto seguido, dio a su pareja una bofetada y comenzó a morderla por diversas partes del cuerpo.
En un momento determinado, el procesado cogió a su hija de dos años y la mantuvo suspendida en el aire con el cuerpo por el exterior de una ventana, hasta que intervino su hermana. Inmediatamente después, propinó un puñetazo a la niña.
Tras ello, amenazó a su pareja con llevarse a los niños y estrellarse con ellos. Así, encerró a la mujer en la casa para lograr su propósito, pero una de sus hijas lanzó a su madre las llaves y ésta logró llamar a la Policía desde una cabina.
