La Fiscalía mantiene su petición de 215 años de cárcel para los 'Latin Kings' acusados de matar a Wilson

La acusación particular anuncia que abrirá un proceso contra el Ayuntamiento por la mala custodia de los cuchillos incautados

Europa Press Madrid
Actualizado: lunes, 6 octubre 2008 17:13
MADRID, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía de Madrid mantuvo hoy su petición de condena de 35 y 36 años de prisión para los seis presuntos 'Latin Kings', en su mayoría 'reyes supremos' de la banda latina, acusados de asesinar el 15 de septiembre de 2005 a Wilson Fernando Ríos Ordóñez, un joven ecuatoriano de 16 años que murió acuchillado en Plaza Elíptica, en el distrito Usera, al ser confundido con un miembro de la banda rival de los 'Ñetas'.

En el trámite de conclusiones, el fiscal Porfidio Quintanilla elevó a definitiva su acusación contra los procesados al estimar acreditada la participación de los encausados en los delitos que se les imputan. Se les acusa de asesinato, asociación ilícita y tentativa de asesinato por la agresión que sufrió John Peter Cortés, uno de los amigos de Wilson. En total, suma una pena de 215 años de prisión para los seis procesados.

El crimen del menor se produjo como venganza del crimen de Danny Paul M.A., alias 'Locote', que tuvo lugar un día anterior a manos de un grupo de 'Ñetas'. Los considerados 'reyes supremos' de los 'Latin' organizaron una reunión para preparar "la caída" de los agresores de 'Locote'. Tras el cónclave, abordaron a cuatro jóvenes en una parada de autobús de Plaza Elíptica, creyendo que eran los autores de la agresión de su compañero. Les acorralaron y cosieron a puñaladas a Wilson.

Luís A.C., apodado 'king Fénix'; Robert Antonio V.D., alias 'King Flaco'; Romel Vinicio P.R., 'King Jordan'; José Leonel L.V., 'King JL'; y Juan Carlos M.B., 'Cata', se enfrentan a 36 años de prisión, mientras que Carlos Eduardo Y.M., alias 'Carloco', afronta una pena de 35 años de cárcel. La diferencia de pena se debe a que a los cinco primeros se les considera dirigentes de la banda latina, mientras que al último se le califica como miembro activo del grupo delictivo.

En la penúltima sesión, el fiscal reclamó al tribunal en concepto de responsabilidad civil que les imponga una indemnización de 120.000 euros destinada a los padres de Wilson y de 24.915 euros para el otro joven que resultó herido en la reyerta. También pidió que se ordene la disolución de la banda latina, recordándole el presidente del tribunal, Juan José López Ortega, que la Audiencia de Madrid ya decretó en junio de 2007 la ilegalidad de la banda en el 'Reino Inca', territorio que pertenece a la Comunidad de Madrid.

Por su parte, el abogado Ildefonso Goizueta, que representa a la familia de Wilson, solicitó condenas similares para los acusados y adelantó a la Sala que abrirá un procedimiento judicial contra el Ayuntamiento de Madrid por la mala custodia que a su juicio realizó la Policía Municipal de los cuchillos que se incautaron en el escenario del crimen, puesto que se mezclaron con otras armas blancas.

"DAR MUERTE PORQUE SÍ" En la exposición de su informe, el miembro del Ministerio Público demandó a la Sección Cuarta que aplique a los acusados el grado máximo de pena por cada delito debido a "la gravedad" de los hechos, argumentando que "hay prueba suficiente" que demuestra su participación en el asesinato.

"No se aprecia más que uso indiscriminado y gratuito de la violencia. Se trató de dar muerte a una persona porque sí", arguyó el fiscal, quien restó credibilidad a la manifestación de los procesados acerca de que en el momento del crimen estaban desvinculados del grupo delictivo. En sus declaraciones, los acusados negaron su participación en el asesinato del crimen y se inculparon entre sí.

Durante sus alegaciones, el fiscal Quintanilla desgranó la acusación que imputa a cada uno de ellos y las pruebas que sustentan sus solicitudes de condena, aportando especial relevancia a la testifical de José Raúl Nicolás, uno de los menores que fue condenado como coautor del asesinato, y de una testigo protegido que pertenecía al grupo delictivo.

En el caso de 'king Fénix', el representante del Ministerio Público justificó su petición de condena en las declaraciones prestadas por José Raúl Nicolás, quien le señaló como autor material de las puñaladas que acabaron con la vida de Wilson. Además, mencionó las revelaciones aportadas por la testigo protegido, quien manifestó que oyó en una reunión de la dirección que 'king Fénix' había sido elegido, junto a 'Carloco', para ejecutar al crimen para ascender de puesto.

Respecto al resto de los acusados, el fiscal trajo a colación las declaraciones de los expertos en bandas latinas que certificaron que los procesados eran miembros fichados de los 'Latin kings' que se situaban en los escalafones más altos dentro de la jerarquía. Por ejemplo, citó a 'King JL', quien es considerado como uno de los cabecillas de la banda en España.

Según los expertos, este joven cofundó la banda, junto con 'El Padrino', es decir, Eric Javier Velastegui Jara, en prisión desde 2003. 'King JL' reconoció en el juicio que durante años se encargó de recaudar las cuotas que exige la dirección a los miembros del grupo, si bien negó que ese dinero fuera destinada a sufragar los gastos de los procedimiento judiciales abiertos contra Velastegui por violar a una joven y por dirigir a los 'latin King'.

El juicio concluirá el próximo jueves con la última declaración de los procesados.

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