MADRID 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, ha señalado hoy que el Gobierno regional denunciará a los "energúmenos" que en la jornada de huelga de ayer rompieron autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) y quemaron contenedores.
En una entrevista concedida a Telemadrid y recogida por Europa Press, Granados ha señalado que lo importante ahora es poder identificar a estos "vándalos violentos" para que respondan ante la Justicia puesto que, por ejemplo, al propietario de la tienda al que le hayan apedreado su luna "supongo que muy contento no está".
"Yo soy muy partidario de que se identifique a estos energúmenos y se les impongan las multas o la sanción a la que haya lugar y desde luego desde el Consorcio de transportes estoy seguro de que, dado que son los que gestionan el transporte en Madrid, que si somos capaces de identificar a los vándalos que ayer rompieron los autobuses, se presentaran las denuncias correspondientes, como no podía ser de otra manera", ha añadido.
Asimismo, ha aludido a los incidentes provocados por algunos piquetes en la sede del PP en la madrileña calle Génova. Para Granados, esto es "absolutamente impresentable" y demuestra que esta huelga ha sido "atípica".
"Creo que no se ha vivido nada parecido en los últimos tiempos. Es una huelga pactada entre el gobierno y los sindicatos. Creo que es una muestra más de la estrategia del PSOE, CC.OO. y UGT en la que todo el mundo tiene la culpa menos el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Y, hombre, ir a la sede de un partido y empapelar de arriba a abajo eso que 'pone responsable la empresa anunciadora' creo que hay que poner una denuncia de manera inmediata. Si es CC.OO, hay que poner una denuncia, es un atropello contra los derechos y libertades al que no nos debemos acostumbrar", ha afirmado.
En consejero de Justicia ha insistido, sobre las responsabilidades legales exigibles a los sindicatos por los incidentes, que el Código Penal "se tiene que aplicar a todo el mundo exactamente igual" porque "es básico en justicia que sea ciega igual para todos".
"El Código penal claro que establece perfectamente que supone el vandalismo en las calles y no dejar ejercer el derecho a la huelga ni tampoco el derecho a ir a trabajar. eso esta recogido y con penas importantes de hasta tres años de prisión", ha indicado.
"LOS SINDICATOS, ENGRANAJE POLÍTICO DEL PSOE"
Granados ha insistido en su idea de que la huelga fue un "paripé" pactado entre el Gobierno central y los sindicatos. En este sentido, ha señalado que éstos han sido "una pieza fundamental del engranaje político de José Luis Rodríguez Zapatero en los últimos años".
"Zapatero es sindicalista como la inmensa mayoría de los afiliados del PSOE están en UGT, y al revé. Son sindicato y partido, hermanos", ha apostillado. De hecho, el también secretario regional del Partido Popular (PP) de Madrid ha afirmado que al líder de UGT "se le llamaba el cuarto vicepresidente".
Granados ha criticado también los tiempos de la huelga al asegurar que "lo lógico" hubiera sido que se convocara hace unos meses y también su objetivo. "Es una huelga en la que los huelguistas dicen 'Mire usted, si nosotros no queremos cambiar el Gobierno, si los del PP son muchísimo peor. Nosotros lo que queremos es que rectifique el señor Rodríguez Zapatero y vaya contra los que han provocado la crisis, que es el PP, los empresarios, los mercados, los especuladores... Todo el mundo menos el señor Rodríguez Zapatero", ha apostillado.
En este sentido, el consejero de Interior ha explicado que el hilo argumental de los sindicatos "ha ido cada vez más focalizado en contra de la oposición, o del PP, lo que en el caso de Madrid es evidente, pero en toda España, culpabilizando de todos los males al PP y cada vez obviando más aquello de la plaza de toros, aquello de Zapatero dimisión. No había más que ver la cara de los dos secretarios generales como diciendo '¡La que estamos montando, que nos van a llevar a capítulo desde Moncloa!'.
REDUCCIÓN LIBERADOS SINDICALES
Sobre la reducción del número de liberados sindicales, Granados ha asegurado que la posición regional no es confrontar con ellos, "sino ordenar su papel, "que es importante y está reconocido constitucionalmente".
"Nosotros no pretendemos en absoluto coartar ni bloquear, pero si ordenar y reducir a lo que la ley marca, con el doble objetivo: ordenar la función que deben cumplir esos liberados sindicales y ahorrar, porque estamos, como dice la presidenta (Esperanza Aguirre) muy acertadamente, en una economía de guerra y en ella los ahorros tienen que venir de todas partes", ha explicado.
Así, ha recordado el objetivo de reducir el presupuesto del 10 por ciento y por ello también se va a reducir en la partida de liberados sindicales "sin atentar contra los derechos de representación que tienen los trabajadores pues es una de ellas".