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MADRID, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado para el Deporte y candidato socialista al Ayuntamiento de la capital en 2011, Jaime Lissavetzky, ha asegurado que ningún político quería ser aspirante en Madrid y, sin embargo, ahora ha habido 'overbooking'. "Hasta hemos tenido unas primarias", ha señalado.
En declaraciones a Telemadrid, Lissavetzky ha indicado que él no es un político que llegue "de nuevas" a la vida política madrileña, ya que ha estado "muy ligado" a la región. "Es verdad que soy el secretario de Estado que más tiempo ha estado en el cargo, pero ahora puedo ser útil para Madrid. Además, ¿a qué madrileño no le gustaría ser alcalde de su ciudad? Sé que es una aventura difícil pero voy a salir a sudar la camiseta. Nada es imposible en esta vida", ha apuntado.
El nombre del secretario de Estado comenzó a sonar para Madrid hace ya cuatro años, pero entonces "quedaba mucho por hacer" en materia deportiva. Además, según ha dicho, tampoco recibió una "oferta formal" por aquel entonces. "Ahora sí", ha apostillado.
"A ocho meses de las elecciones, soy el único candidato oficial", ha afirmado Lissavetzky, quien ha señalado que él no ha sido nombrado por nadie sino que ha sido elegido por las distintas agrupaciones de la ciudad a las que ha pedido su aval y su voto. "Nadie quería venir a Madrid y en cambio ahora, ha habido 'overbooking'. Hasta hemos tenido unas primarias", ha comentado el líder socialista quien dice de sí mismo que es "un candidato antibiótico de amplio espectro".
APOYO A JIMÉNEZ
Durante el proceso de primarias que se ha desarrollado para elegir al candidato socialista a la Comunidad de Madrid, unas elecciones en las que se enfrentaron el secretario general del PSM, Tomás Gómez, y la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, Lissavetzky mostró su preferencia por la segunda.
"Llevo doce trienios en política, creo que tengo derecho a apoyar a quien quiera. Y a opinar. Y no me arrepiento de nada. Además, nunca dije nada en contra de Gómez. Hubo un momento en que los militantes tuvimos que hablar y yo lo hice. Pero a mí no me dio ningún disgusto porque ganara Gómez en las primarias, sí que me lo llevé porque Trini perdiera", ha aclarado.
Sobre sus proyectos de futuro, el secretario de Estado ha avanzado que uno de los ejes sobre los que girará su debate con su rival, el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón, será la deuda del Ayuntamiento, ya que no está "de acuerdo" con que ésta sea tan elevada.
"Sé que hay ayuntamientos socialistas que también se han endeudado, pero creo que si hay que endeudarse, hay que hacerlo razonablemente. Siempre hay unos límites y saber por qué te endeudas. No es posible que antes de Gallardón, Madrid tuviera una deuda de 1.300 millones y hoy supere los 7.200", ha aseverado.
"Si hay que echar una mano, Gallardón la tendrá en mí para intentar ayudarle, pero no se arreglan las cosas insultando. Yo quería con él tener una campaña de guante blanco pero no veo la necesidad de llamar mentiroso al presidente del Gobierno. De decir que no se ha invertido nada en Madrid cuando, en el plan deportivo y el Plan E se han invertido 900 millones... Para defender a los madrileños no hace falta insultar y si el señor Gallardón está harto, como dice, no sé qué hace preparando una nueva etapa en al Ayuntamiento suponiendo que logre volver a ser alcalde", ha sentenciado.
"SI EL PP TIENE PRESO, ES PORQUE ALGO HA HECHO BIEN"
Sobre las encuestas en las que se dan buenos resultados para el PP, el candidato a la Alcaldía ha señalado que "es un hecho evidente" que si el PP "tiene este preso en Madrid es porque algo ha hecho bien". "En mi opinión, otras ha hecho mal y la ideología socialista es contraria a muchas de sus políticas", ha agregado.
A su juicio, la alternancia "es buena" y ha considerado que sería óptimo volver a un Madrid "que sea de las personas y no de sueños y proyectos grandiosos". "En mi vuelta a Madrid, me he dado cuenta de que sigue habiendo desequilibrios. Hay barrios con un 4 por ciento de paro mientras que otros tiene un 21 por ciento, hay 40.000 niños, hay que hacer una apuesta por escuelas infantiles y por equipamientos que no han tenido el peso que deberían tener", ha señalado.
Finalmente, ha mantenido que tanto si consigue ser alcalde como si no, se va a quedar los cuatro años que dura una legislatura en el Consistorio y ha afirmado que pedirá la ayuda de José Luis Rodríguez Zapatero. "Yo nunca me avergonzaré de mi secretario general estén las cosas como estén. Que venga a nuestros mítines cuantas más veces, mejor", ha concluido.
