Lissaveztky denuncia la "tremenda dejadez" del Ayuntamiento en temas sociales

MADRID 13 Sep. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del grupo socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha criticado este jueves la "tremenda dejadez" del Ayuntamiento en temas sociales, donde ha declarado que "Madrid no sólo se mide por el Palacio de Cibeles, sino también por el trato a sus mayores".

El portavoz ha visitado esta mañana el barrio de Argüelles, junto con responsables de la Agrupación Socialista de Moncloa, el concejal de Familia y Asuntos Sociales, Pedro Cerolo, la responsable del tema de Mayores, Carmen Sánchez Carazo, y el diputado Autonómico de la zona, Pedro Santín, para criticar la paralización desde hace 10 años del Centro Infante Don Juan, que sigue cerrado "a cal y canto".

Hace 10 años, en 2002, el Ayuntamiento de Madrid y el Ministerio de Defensa suscribieron un convenio de colaboración en el ámbito del Cuartel del Infante Don Juan, en el Paseo de Moret, para la ubicación de un centro de mayores. En 2006 lo perfeccionan y en 2009 empiezan las obras de remodelación que acabarían en 2011, y desde entonces, "el centro sigue cerrado".

"Hay una placa en la puerta que dice que la duración de las obras sería de 12 meses, pero hoy han borrado la fecha de inicio", ha apuntado Lissavetzky.

UN VERANO "NEGRO" PARA LOS MAYORES

El portavoz ha señalado que "desde lo público tiene que haber actuaciones para estas personas, y más en este año 2012, que es el Año Internacional en Envejecimiento Activo". "Nuestros mayores deben participar de la manera más activa en la sociedad madrileña". Es un sector "muy importante", concretamente "189.000 superan los 80 años en la ciudad, de los cuales 280.000 viven solos".

En este sentido, el portavoz ha criticado la "tremenda dejadez" del Ayuntamiento en asuntos sociales, y culpa a Ana Botella y a Gallardón de su megalomanía, "ellos dicen que esta crisis viene por la económica, pero en realidad viene por el despilfarro y el lujo".

"En los presupuestos de 2012 había una dotación en el área de Hacienda de 195.000 euros para acabar la rehabilitación del edificio y otra en el área de Familia y Servicios Sociales de 240.000 euros, que fue recortada en 35.000". "Este centro no se abre porque el recorte de Botella no deja llevarlo a cabo", ha señalado el portavoz socialista.

Lissavetzky ha concluido diciendo que ha sido "un verano negro para las personas mayores", ya que de los 69 centros municipales, 7 han estado cerrados, y "ni siquiera se han llevado a cabo actividades socioculturales, cuando la política dirigida a los mayores es una prioridad para el Ayuntamiento de Madrid".