La madre de Palomino considera como "buena sentencia" la condena a 26 años de cárcel al asesino de su hijo

Actualizado: lunes, 19 octubre 2009 19:11

MADRID, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -

La madre de Carlos Palomino, el joven asesinado en la estación de metro de Legazpi por el ex militar Josué Estébanez el pasado 11 de noviembre de 2007, María Victoria Muñoz, consideró hoy como una "buena sentencia" el fallo de la Audiencia Provincial de Madrid que ha condenado a 26 años de prisión al agresor y acredita el agravante ideológico.

En declaraciones a Europa Press Televisión, la madre de Palomino reconoció que, aunque no se le haya impuesto una pena de 37 años de cárcel, como la acusación particular solicitaba, se da por "satisfecha" ya que a Estébanez se le ha considerado culpable y como un "asesino" gracias a que ha quedado acreditado el agravante del artículo 22.4 del Código Penal en relación a la discriminación por motivos ideológicos.

"Mi preocupación era que los años a los que le condenasen los cumpliera íntegros. Me tengo que dar por contenta, no quiero recurrir", apuntó. Con este fallo, la madre de Palomino consideró que ha "cerrado un ciclo" de la historia de su hijo y ha conseguido "cumplir la promesa" que le hizo en su momento de darle "Justicia".

Por su parte, el abogado de la familia de Palomino, Erlantz Ibarrondo, indicó que recoge la sentencia "con moderada satisfacción" porque no cumple "todas las expectativas" que manifestaron en el escrito de la acusación particular pero sí queda acreditada el agravante del artículo 22.4 del Código Penal en relación a la discriminación por motivos ideológicos, base "fundamental" de su escrito.

La Fiscalía de Madrid solicitaba 30 años de cárcel por el delito de asesinato, con la agravante de odio ideológico. Según la fiscal, Josué Estébanez, controló la situación puesto que preparó y ocultó tras su espalda el arma homicida antes de que el grupo de Palomino entrara en el vagón de metro donde se cometieron los hechos.

En la sentencia, la Sala rechaza que Josué actuara en legítima defensa y concluye que la muerte de Carlos fue consecuencia directa de la agresión del acusado, realizada de forma plenamente voluntaria y con la consciencia, no sólo probable, sino absoluta de acabar con su vida. Añade que Josué ocultó la navaja cuando se encontraba en el interior del metro, a la espera de atacar con cualquier excusa a cualesquiera de las personas que por su estética consideraba antifascistas.

HECHOS PROBADOS

La Sala considera probado que el 11 de noviembre de 2007, Josué se dirigió en metro a la estación de Usera, para asistir a la manifestación convocada con el lema 'contra el racismo anti-español' por Democracia Nacional, partido vinculado a la extrema derecha, ideología que compartía el acusado, quien portaba una navaja monofilo de, al menos, siete centímetros de hoja, y un puño americano.

Al llegar a la estación de Legazpi, el acusado observó que en el andén se encontraba un grupo superior a cien de jóvenes, que identificó como antifascistas por su apariencia externa. El grupo iba a boicotear la manifestación de Democracia Nacional.

Antes de que el tren se detuviese, sacó su navaja al tiempo que bostezaba, yendo tranquilamente a situarse junto a una de las puertas del vagón, ocultando la navaja abierta y con la hoja hacia arriba en la cara posterior del antebrazo, esperando a que entrasen algunos de los citados jóvenes para agredir a cualquiera de ellos con el menor pretexto por su enfrentada divergencia de pensamiento.

Entre los jóvenes, se encontraba Palomino, quien al acceder al vagón y percatarse que la estética de Josué se correspondía con la de un skin neonazi, le preguntó sobre su sudadera en la que visiblemente figuraba: "Three-Stroke", marca que habitualmente usan personas de dicha ideología, a la vez que se la tocaba.

De repente, el acusado le asestó una fuerte puñalada en el tórax, entre el tercer y cuarto espacio intercostal izquierdo, con trayectoria de arriba-abajo, que penetró unos siete centímetros alcanzando el ventrículo izquierdo del corazón, y que le produjo la muerte poco después por un shock hipovolémico.