Abandona la vía administrativa tras años de acumular multas, incluso órdenes de cierre, por exceso de ruido o de aforo pero que "tretas administrativas y jurídicas" impedían que se ejecutara
MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Madrid deja la vía administrativa y opta por la vía penal elevando a la Fiscalía a una docena de locales, en principio, por un delito de insolvencia punible después de años de acumular multas, sanciones y quejas, incluso órdenes de cierre, por exceso de ruido o de aforo pero que "tretas administrativas y jurídicas" impedían que se ejecutara.
Lo ha anunciado en rueda de prensa la portavoz del Gobierno municipal, Rita Maestre, que ha explicado que el expediente de cada local --una docena en principio aunque hay un "número de locales que se encuentran en una situación similar"-- llegará a la Fiscalía con el correspondiente informe de la Policía Municipal, de Medio Ambiente y de la Agencia Tributaria y que después será la Fiscalía la que decidirá si existe caso para continuar con la tramitación.
El Consistorio se personará como acusación particular. El Gobierno pretende ganar en agilidad y en tiempos al pasar de la vía administrativa a la penal.
Maestre ha explicado que se creó una comisión ad hoc por las distintas áreas para abordar la situación de estos locales, cuyo cierre "llega pero tarda años" por la vía administrativa. El primer fruto de esta comisión es el paso a las acciones judiciales para poner freno a "auténticos entramados empresariales con una enorme capacidad para buscar atajos de la Administración".
Lo que hacen, ha detallado la portavoz, es declararse insolventes en los procesos sancionadores, por lo que no pueden ser embargados poniendo los establecimientos con otro nombre aunque con las mismas personas.
