MADRID 22 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los madrileños tendrán que hacer frente a un aumento de la presión fiscal en 2009, cifrada en un 22 por ciento por el Grupo Municipal Socialista, debido al incremento aprobado hoy en el Pleno extraordinario, con los votos a favor del PP, de las ordenanzas fiscales, en las que se introducen modificaciones con el nuevo índice fiscal de las calles, en el IBI, con la aparición de la nueva de tasa de basuras y los cambios reguladora del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER).
El delegado de Hacienda en el Ayuntamiento de Madrid, Juan Bravo, aseveró en el Pleno extraordinario celebrado hoy en la Casa de la Villa que ni con una reducción de impuestos ni con la aparición de nuevas tasas, esto es, únicamente con medidas fiscales, se podrá salir de la crisis a corto plazo.
La lectura que hizo de las ordenanzas el PSOE, a través de su portavoz, David Lucas, es que sería necesaria la aplicación de una "congelación real" de los impuestos y tasa y no la acorde al último IPC conocido, del 4,2 por ciento. "No entendemos que haya mayor presión fiscal, con nuevas tasas, sin que se ofrezcan nuevos servicios", manifestó tras insistir en la necesidad de perseguir el fraude fiscal.
El concejal de Hacienda de IU, Daniel Álvarez, remarcó la necesidad de establecer medidas correctoras "para que las rentas más bajas paguen menos y las altas más", algo que centró especialmente en el IBI y en la entrada a las instalaciones deportivas. De este modo, como detalló, se podría mantener el mismo nivel de recaudación.
Con respecto al Impuesto de Bienes Inmuebles, el incremento medio del recibo el próximo año se situará en un 12 por ciento aunque el delegado de Hacienda, Juan Bravo, detalló que más de 2.700 locales comerciales bajarán su tributación por el IBI el próximo año alrededor de un 30 por ciento. Y es que los locales comerciales pasarán del 0,8 por ciento al 0,5, esto es, pasarán del tipo incrementado al tipo general.
El equipo de Gobierno ya explicó que, mientras estos locales verán reducida su aportación al IBI, las oficinas con mayor valor catastral aumentarán los porcentajes a pagar ya que el año que viene subirán del 0,890 al 1,1.
Las enmiendas de IU, todas ellas rechazadas, reclaman la elaboración de un reglamento que defina el concepto de 'vivienda desocupada' para hacer efectivo el recargo sobre la cuota líquida del IBI que, bajo el amparo del texto refundido de la Ley de Haciendas Locales, gravaría a los inmuebles de uso residencial desocupados de manera permanente.
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