MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los diputados de PSOE e IU que hoy se encontraban en el pleno de la Asamblea de Madrid abandonaron el hemiciclo después de las preguntas de la oposición a la presidenta regional, Esperanza Aguirre, en protesta por el "cierre en falso" de la comisión de investigación por la presunta trama de espionaje que acoge el Parlamento regional. Mientras Aguirre estaba en uso de la palabra, aludiendo a los casos de imputados en las filas socialistas, todos los diputados de la oposición, salvo las portavoces, Maru Menéndez (PSOE) e Inés Sabanés (IU), se levantaron en silencio y han salido del hemiciclo.
Este plante se produce un día después de que el consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Francisco Granados, se convirtiera en el último compareciente de la Comisión de Investigación de los espías, en contra de los deseos de la oposición, que quería escuchar también las declaraciones del resto de comparecientes reclamados por ellos y especialmente, las de los miembros del PP presuntamente espiados como el ex consejero de Justicia y Administraciones públicas, Alfredo Prada y del vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo.
No obstante, el Grupo Popular ayer consideró que ya se había esclarecido el objeto de la comisión porque los presuntos partes de seguimiento se habían demostrado "falsos", y apoyándose en su mayoría parlamentaria decidió poner fin a la Comisión de Investigación.
Fruto de esa decisión "unilateral", los parlamentarios de PSOE e IU abandonaron el hemiciclo un cuarto de hora después del comienzo de la sesión de control al Gobierno y en medio de una pregunta de los socialistas a la presidenta regional sobre la supuesta trama de corrupción con la que están relacionados varios miembros del PP de Madrid, entre los que hay tres diputados regionales del PP.
A pesar de que el 'pacto' alcanzado entre los dos Grupos Parlamentarios de PSOE e IU establecía que los parlamentarios esperarían hasta el término de la pregunta de la portavoz socialista, diputados del PSOE comenzaron a abandonar sus escaños en plena respuesta de la presidenta Aguirre, que acusó a los socialistas de tener varios imputados en sus filas. Los parlamentarios de IU siguieron a los socialistas a los pasillos de la Cámara.
Allí, el portavoz adjunto del PSOE Adolfo Navarro explicó que la razón de los parlamentarios para abandonar el hemiciclo era manifestar "su rechazo y profunda indignación democrática por cerrar la comisión tras cuatro miserables días" cuando, además, el PP aprobó ampliar la comisión hasta el 31 de marzo.
"No le vamos a consentir a Aguirre que pisotee los derechos de los ciudadanos y que se niegue a esclarecer la verdad de la trama de espionaje", destacó el socialista, que fue el primero que tuvo que volver al hemiciclo para preguntar al consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Francico Granados, por la estructura de seguridad de la región.
No obstante, en base al 'pacto' alcanzado entre PSOE e IU, sus compañeros de filas no comenzaron a entrar hasta que terminó la sesión de control al Gobierno. Eso conllevó algún 'problema' en la sesión de control, donde no se pudo realizar una pregunta de IU a la consejera de Educación, Lucía Figar, porque la diputada que la iba a realizar no se encontraba en el hemiciclo.
El socialista Francisco Hernández consiguió hacer su pregunta al consejero de Sanidad, Juan José Güemes, porque aunque no se encontraba en su escaño, rondaba por algún lugar del hemiciclo y la presidenta de la Cámara, Elvira Rodríguez, accedió a que formulara su pregunta tras destacar que el abandono convirtió al sesión de control en "una cuestión estrambótica".
Ya en los pasillos de la Cámara, la portavoz socialista, Maru Menéndez, explicó que abandonaron el hemiciclo por el "atropello democrático e institucional del PP en relación a la trama de espionaje y al cerrojazo a la comisión de investigación", pero reseñó que mantuvieron la presencia de los grupos en las figuras de las portavoces de la oposición, que permanecieron en el hemiciclo.
"ATROPELLO SIN PRECEDENTES"
Menéndez tildó de "atropello que no tiene precedentes" la evolución de la Comisión de Investigación, que tan sólo ha contado con cuatro jornadas con comparecencias que han permitido escuchar a once invitados, y criticó que se cerrara de manera "unilateral" la comisión cuando estaba habilitado tiempo para sus trabajos hasta el 31 de marzo.
La portavoz de IU, Inés Sabanés, aseguró que la situacion es "un aviso clarísimo y un mensaje a la presidenta regional" para decirle que "las instituciones son de todos", que la "Asamblea tiene que preservar su carácter de autonomía".
Además, defendió que "la dignidad de los diputados no puede ser vulnerada" y que "los reglamentos no se pueden utilizar para acomodarlos para las previsiones del Gobierno regional". "Las normas son comunes y para todos", defendió Sabanés que destacó que la comisión se ha cerrado "imponiendo plazos horarios, día y forma del debate, incluso una vez cerrada la comisión".
En el lado opuesto se expresó el popular David Pérez, que consideró que lo "no puede hace un partido político como el PSOE es seguir faltando el respeto a las instituciones" e "incumplir su obligación de comparecer en esta Cámara".
"Recuerdo que el Reglamento en su artículo 25 obliga a los diputados a asistir al pleno y lo que no puede hacer un grupo parlamentario es abusar de las instituciones como está haciendo el PSOE", señaló Pérez, que apuntó que los diputados no tiene derecho a faltar "el compromiso y la obligación de defender los intereses de los madrieños". "Atribuyo este acto a la falta de respeto a las instituciones, a la falta al deber como representantes de los ciudadanos", concluyó.
