MADRID 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz socialista en materia de Transportes en la Asamblea de Madrid, José Manuel Franco, ha alertado este jueves de que las últimas incidencias que se están produciendo en el servicio de Metro de Madrid "no son casuales", sino que tienen que ver con los "brutales recortes" aplicados por el Gobierno regional.
"Nos encontramos ante un estado de decadencia en Metro de Madrid, que podría ser un servicio ejemplar, pero que por la mala gestión de las personas que están al frente de dicha empresa está teniendo, últimamente, demasiadas incidencias, que no son casuales, sino que tienen que ver, como llevamos defendiendo desde el PSM, con los brutales recortes que afectan al mantenimiento y que afectan, incluso, a la compra de recambios", ha manifestado el responsable socialista, según un comunicado del Grupo Parlamentario
El portavoz socialista ha hecho estas declaraciones tras conocer la nueva interrupción que ha sufrido la línea 10 del suburbano esta mañana que ha mantenido suspendido el servicio durante más de dos horas, para exigir al Gobierno regional que "de una vez por todas ponga solución a este tipo de problemas que al final quien los paga son los usuarios", al tiempo que ha alertado de que esto degenera en una "pérdida de usuarios por parte de Metro de Madrid".
En este sentido, ha recordado que es el segundo incidente que se produce en menos de 78 horas, por lo que ha considerado que hay un "déficit importante" en lo que se refiere al mantenimiento, así como una "falta de planificación" con respecto a determinados trenes, concretamente los de la Serie 7.000, que, según ha indicado, están circulando por líneas que "seguramente no son las más adecuadas". "Tampoco los trenes que se compraron en su día a Italia quizás no sean los más adecuados para circular por la infraestructura viaria de la Comunidad de Madrid", ha agregado.
Además, ha señalado que a estas interrupciones hay que añadir otras incidencias, como el hecho de que algunas estaciones llevan semanas con las escaleras mecánicas averiadas, con lo que esto supone para la accesibilidad, y "no sólo a las personas que manifiestan algún tipo de discapacidad física o algún tipo de reducción en su movilidad, sino para cualquier ciudadano que pretenda acudir a Metro de Madrid y tiene que bajar decenas y decenas, o subir, que es peor, decenas y decenas de escaleras".