Vuelven a pedir la dimisión del concejal Henríquez de Luna porque la Junta de Salamanca es "uno de los focos del Guateque"
MADRID, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
El edil socialista de Urbanismo en el Ayuntamiento de Madrid, Pedro Sánchez, criticó hoy la "actitud resignada y el conformismo" ante el "desgobierno" en la concesión de licencias en el Consistorio después de que el concejal-presidente de la Junta de Salamanca, Íñigo Henríquez de Luna, declarara ayer en los juzgados de Plaza Castilla por su imputación por un presunto delito de tráfico de influencias en el 'caso Becara'.
"Me parece una absoluta irresponsabilidad que un concejal del Ayuntamiento de Madrid califique de normal, según los medios de comunicación, que los locales abran sin licencia (por la tardaza en su concesión), lo que demuestra la actitud de resignación, conformismo y de desgobierno que reina en el Ayuntamiento de Madrid", señaló Sánchez en declaraciones a Europa Press.
Desde que el 'caso Becara' saliera a la luz, Henríquez de Luna ha defendido que su acusación respondía a "una venganza" de la familia denunciante, los Goyeneche, insistiendo en que la Junta Municipal de Salamanca "no intervino en la concesión de la licencia" a la tienda Becara, situada en los bajos de Juan Bravo, 18. Según el edil, la primera licencia se otorgó en 1998. Entonces, él no era concejal del Ayuntamiento de Madrid y todas las licencias se tramitaban en la Gerencia de Urbanismo.
En su comparecencia, el edil popular insistió en que "todas las licencias se tramitaron en Urbanismo" y añadió que ello "no quiere decir que sean absolutamente legales". Además, insistió en que su imputación se debe a "una venganza" de la familia Goyeneche porque "la Junta les precintó una oficina que tenían en la segunda planta" del edificio en el que se encuentra la tienda de decoración Becara.
Por su parte, el concejal socialista Pedro Sánchez remarcó hoy que Henríquez de Luna "no niega las presuntas irregularidades en Becara sino que simplemente traslada la patata caliente al Área de Urbanismo", dirigida por Pilar Martínez. "Me preguntó por qué tarda tanto Pilar Martínez en solicitar su declaración como testigo en el proceso abierto, ¿no será que tiene algo que esconder?, manifestó hoy el socialista.
LA "SOLEDAD" DE HENRÍQUEZ DE LUNA
También destacó la "soledad" de Íñigo Henríquez de Luna en su comparecencia en Plaza Castilla ya que, aunque contó con el apoyo del secretario general del PP de Madrid, Francisco Granados, no estuvo acompañado "ni por el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, ni por nadie del Gobierno municipal".
Por otro lado, Pedro Sánchez reiteró que Henríquez de Luna "debería haber dimitido por el escándalo en la tramitación de licencias de la Junta Municipal de Salamanca, que está siendo investigada y ha sido uno de los principales focos de la trama Guateque". Es por ello que el Grupo Municipal Socialista volvió a exigir a Ruiz-Gallardón que cese "fulminantemente" al concejal de Salamanca por sus "responsabilidades políticas" en el asunto.
El procedimiento judicial del 'caso Becara' se inició a instancias de una denuncia interpuesta por María Adelaida Rodríguez-Patón y Juan Mariano Goyeneche, vecinos del edificio de la calle Juan Bravo, que dieron cuenta al juez Santiago Torres, el mismo que instruye el 'caso Guateque' de concesión ilícita de licencias en el Ayuntamiento de Madrid, de una serie de irregularidades cometidas supuestamente por responsables de la Gerencia Municipal de Urbanismo en la concesión de licencias a la tienda de decoración Becara.
La titularidad del local Becara corresponde a la mercantil BZ Asuntos de Familia, S.L., cuyo apoderado es el ex diputado del PP Jorge Trias Sagnier, marido de una de las propietarias. El ex gerente de Urbanismo Luis Armada otorgó en 1998 y 1999 la licencia de obras y apertura. En marzo de 2000, Becara abrió sin licencia de funcionamiento porque se le denegó por quebrantar la normativa urbanística al ser un edificio calificado como fuera de ordenación.
Esta denominación obliga a mantener la misma actividad que tenía cuando se concedieron las primeras licencias. Anteriormente, la actividad era de compra y venta de vehículos. El inicio de funcionamiento de la tienda sin licencia propició que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) declarase ilegal el local por infringir la norma urbanística. Por ello, el Alto Tribunal madrileño anuló en 2005 un permiso de funcionamiento que autorizó el Consistorio de Madrid.
