PSOE pide el fin de la "anunciatitis" de Gallardón y "concreción" en el proyecto de renovación del entorno del río

Actualizado: martes, 4 mayo 2010 16:37

MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -

El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, David Lucas, pidió hoy que se ponga coto a la "anunciatitis" que dice sufrir el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, además de "concreción" en el calendario y la forma de financiar el proyecto de renovación urbana del entorno del río Manzanares.

El PSOE presentó hoy públicamente las alegaciones al plan, con el que se pretende aplicar los criterios de calidad y sostenibilidad que inspiran el proyecto Madrid Río, actualmente en ejecución sobre suelo público, así como las directrices del Plan de Calidad del Paisaje Urbano. Para ello se darían ayudas a los vecinos para renovar todas las fachadas y traseras del río.

El Plan se extiende a una superficie de 390 hectáreas, de las que 144 son de titularidad privada. El ámbito del plan discurre por los distritos de Moncloa-Aravaca, Centro, Arganzuela, Latina, Carabanchel y Usera, coincidiendo con las manzanas que forman la fachada con frente al río Manzanares y la avenida de Portugal.

Lo que reclaman los socialistas es "concreción" en dicho proyecto ya que no cuenta "ni con un plazo conocido para su desarrollo ni define la financiación para la rehabilitación de las viviendas y de la mejora del entorno".

En sus alegaciones exigen además que se delimite un conjunto de ámbitos concretos en los que se proponen modificaciones del planeamiento urbanístico. En definitiva, lo que piden, como explicó Lucas, es "una mayor concreción para evitar cualquier intento de especulación sobre el suelo".

Lucas expuso también su temor a que se generen expectativas relativas a la rehabilitación entre los vecinos de las 22.000 viviendas afectadas y que podrían quedar "frustradas" ya que no hay "ni tiempos ni financiación concretos".

Basó su argumentó en la actual experiencia que tiene el Ayuntamiento con la Comunidad en materia de rehabilitación y que se saldó en la última bilateral entre el Ministerio de Vivienda y el Gobierno regional con el rechazo municipal a algunas propuestas autonómicas. El resultado es, en boca de Lucas, que "5.000 viviendas se quedan sin rehabilitar en Madrid".