El conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio de la Generalitat Valenciana, Vicente Martínez Mus, junto al consejero de Transportes de la Comunidad, Jorge Rodrigo. - COMUNINDAD DE MADRID
MADRID 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio de la Generalitat Valenciana, Vicente Martínez Mus, ha anunciado este viernes que la pasarela de acceso a Torrent (Valencia) desde la carretera CV-403, situado sobre el barranco del Poyo y conocido popularmente con el nombre de 'puente de McDonalds' se denominará Puente de la Comunidad de Madrid en agradecimiento a la ayuda que desde la región se ha prestado en la zona afectada por la dana de finales de octubre.
Así lo ha indicado en un acto celebrado en Madrid en homenaje a los conductores del Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM) que, de forma voluntaria, prestaron servicio en las zonas afectadas por la dana que asoló la Comunidad Valenciana el pasado mes de octubre.
Durante el mismo, el consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, ha hecho entrega del diploma que acredita la Gran Cruz de la Orden del Dos de Mayo a todos aquellos que no pudieron recogerlo por encontrarse aún desplazados.
En concreto, el dispositivo de ayuda, activado por el Ejecutivo autonómico apenas una semana después de la catástrofe, ha movilizado en casi ocho meses a más 200 trabajadores, entre conductores, jefes de tráfico y coordinadores y a un total de 45 autobuses, con el objetivo de ofrecer un servicio sustitutivo al Metro que quedó interrumpido por los efectos devastadores de la Dana.
"Ha sido una época que por desgracia viene marcada por una debacle, por una catástrofe grande, pero también nos ha enseñado que somos capaces de hacer cosas muy buenas, que sois capaces de hacer cosas muy grandes y que nunca os lo agradeceremos suficiente", ha dicho el conseller valenciano.
En concreto, el dispositivo de ayuda, activado por el Ejecutivo autonómico apenas una semana después de la catástrofe, ha movilizado en casi ocho meses a más 200 trabajadores, entre conductores, jefes de tráfico y coordinadores y a un total de 45 autobuses, con el objetivo de ofrecer un servicio sustitutivo al Metro que quedó interrumpido por los efectos devastadores de la Dana.
El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras madrileño, por su parte, ha subrayado el "orgullo" que siente la Comunidad al haber podido ayudar a los afectados.