MADRID 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
Una testigo que presenció el momento en el que una avioneta siniestrada se precipitó contra el suelo a la altura del kilómetro 27 de la M-40, en uno de sus aledaños, aseguró hoy que en principio creyó que se trataba "de una aeronave de las que hacen acrobacias" hasta que escuchó "un golpe seco".
En declaraciones a los medios, Mercedes, que vio como se estrelló el aparato, explicó que "la avioneta iba muy bajito y parecía que era de las que hacen acrobacias, porque subía y bajaba muchas veces", pero afirmó que de pronto se escuchó "un golpe seco" y vio la aeronave contra el suelo, aunque no salía ni humo ni fuego.
Cuando los bomberos llegaron al lugar, encontraron en el interior de la avioneta "al conductor y al copiloto, los dos fallecidos y fuertemente atrapados por los miembros inferiores" debido al choque frontal, informó el jefe de guardia de bomberos, José Luis Legido.
Los efectivos de bomberos tuvieron que "desmontar el techo de la avioneta" para sacar los dos cadáveres. Teniendo en cuenta el hecho de que ya estaban fallecidos y prefirieron realizar las maniobras de liberación --en las que han empleado "unos cuarenta minutos"-- un poco más despacio para no dañar más los cuerpos".
Por su parte, la supervisora de guardia de Sammur-Protección Civil, Mari Luz Sabín, aclaró que las víctimas, dos varones de cerca de 30 años, "presentaban lesiones por aplastamiento lo suficientemente graves como para haberles ocasionado la muerte instantánea", es por ello que no se procedió a practicarles ningún tipo de maniobras de reanimación.