MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
La inspección y registro que la Guardia Civil llevaba efectuando desde las 11.30 horas a la finca de la tía del casero acusado de asesinar a una mujer en Majadahonda ha terminado a las 18 horas sin éxito, han informado a Europa Press fuentes del Instituto Armado.
Los perros del Servicio Cinológico y los agentes de Criminalística han recogido algunas muestras, pero "ninguna relevante", ya que no han descubierto pruebas biológicos. En el registro ha estado presente el detenido, Bruno H., de 32 años, que tampoco hoy ha colaborado.
La Guardia Civil descarta que mañana continúe la búsqueda en esta finca o en algunas propiedad de la familia del detenido. Concretamente, la registrada este jueves tiene varias hectáreas de olivos y no cuenta con vivienda.
Está situada en la localidad toledana de Santa Cruz de la Zarza, limítrofe con los municipios madrileños de Villarejo de Salvanés y Estremera. Concretamente, se trata de la parcela 41 del polígono 11 de Santa Cruz, en la zona de 'El Rojo'.
Hasta el lugar se han acercado esta mañana ocho coches de la Benemérita, uno de ellos un furgón y otro un todoterreno. La Guardia Civil ha acordonado el terreno para evitar que sean grabados los trabajos de los agentes.
No obstante, los periodistas han advertido la presencia del presunto asesino en el registro y de perros y agentes de Criminalística con sus habituales trajes blancos para buscar posibles restos humanos de la supuesta víctima, que finalmente no han sido hallados. También están inspeccionado un gran contenedor azul que hay en la finca.
Precisamente este mediodía el Juzgado de Primera Instancia número de Majadahonda, que es el que lleva la instrucción del caso, ha levantado el secreto de sumario por la presunta muerte de la mujer argentina. Además, mañana viernes a las 11 horas la delegada del Gobierno, Concepción Dancausa, ofrecerá una rueda de prensa para dar más detalles del suceso.
VARIAS LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN
La Benemérita mantiene varias líneas abiertas para encontrar a Adriana G., la última inquilina del piso de Majadahonda que le alquilaba el detenido. Tras su desaparición, ha buscado restos humanos en esta casa. Uno de ellos, concretamente una mancha de sangre hallada en una picadora, ya se ha confirmado que pertenece a la mujer.
Por eso, y ante la posibilidad de que Bruno pudo matarla, luego descuartizarla y posteriormente arrojar los restos humanos a la basura, varios agentes están rastreando el vertedero de Pinto donde acaban las basuras de los contenedores de la urbanización majariega.
Mientras tanto, han iniciado también la búsqueda en varias fincas de su familia ante la posibilidad de que escondiera o enterrara los restos humanos allí. Además del terreno en este pueblo de Toledo también poseen otros en municipios de Madrid y Salamanca.
BÚSQUEDA DE LA TÍA DEL DETENIDO
Los guardias civiles han localizado a los anteriores inquilinos del chalé de Majadahonda, descartando así que se trate de un asesino en serie. No obstante, no logran dar con la tía del detenido, Lidia H.F., ya que no creen la versión que les dio su sobrino de que se había ido a una residencia, sin concretar cuál.
Lidia es la propietaria de las fincas y también de la casa de Majadahonda. Los agentes sospechan que su sobrino puedo matarla hace tiempo para hacerse con estas propiedades y recoger las mensualidades de los arrendamientos y de su pensión.
Por ello, la Guardia Civil ha seguido los movimientos de las cuentas bancarias a nombre de la tía y han descubierto sólo movimientos de ingresos procedentes de su pensión pero nada de gastos de residencias ni de otros pagos de bienes o servicios, según han concretado las mismas fuentes.
