MADRID, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Transportes e Infraestructuras, Manuel Lamela, presentó hoy la reordenación de las líneas de autobuses interurbanos que prestan servicio a los municipios de Arroyomolinos y Moraleja de Enmedio, y que conectarán directamente a partir del jueves ambas localidades con el centro de la capital, en concreto, con el intercambiador de Príncipe Pío.
Otra de las líneas comunes ampliará su trayecto y su frecuencia y conectará las dos zonas con el Hospital de Fuenlabrada y Metrosur. El consejero explicó que estas novedades "mejorarán en gran medida las comunicaciones de los dos municipios, incrementando también el número de expediciones para ofrecer mayor cantidad y calidad de viajes".
Asimismo, señaló que el objetivo de estas nuevas líneas es acercar a los ciudadanos a los centros intermodales del transporte y a la red de transporte público de la Comunidad, "sin duda, la mejor de España y una de las mejores de Europa".
La nueva flota de autobuses interurbanos que prestarán el servicio en Arroyomolinos y Moraleja de Enmedio se aumentará en 13 autobuses, con las últimas tecnologías en materia de seguridad, accesibilidad y confort. De hecho, cuentan con plataformas electrónicas para el acceso a sillas de ruedas y están conectados por vía satélite a la central para controlar las frecuencias y atender más rápido las incidencias sin necesidad de tener inspectores de seguridad en la calle.
La primera de las líneas que se modificará es la número 495, que unirá ambos cascos urbanos con Príncipe Pío, y de esta forma con la red de Metro y de Cercanías de la capital. Su frecuencia será de 20 minutos los días laborables y de media hora los sábados y festivos.
Por otra parte, la línea 498 se prolongará para llegar hasta el Hospital de Fuenlabrada, proporcionando una conexión directa con elcentro sanitario, así como a la Universidad Rey Juan Carlos y Metrosur.
Lamela señaló que "nuevamente se concibe la movilidad como un todo global, donde todos los medios tengan que estar unidos entre sí, ya sea servicios interurbanos, Cercanías y Metro". Además, en este último caso, los viajes se incrementarán llegando casi a duplicar el número de expediciones entre diario, pasando de las 41 actuales a 62.
El consejero también destacó otra serie de novedades en las líneas ya existentes, cuyo objetivo será dotar de mayor accesibilidad a los nuevos barrios de Arroyomolinos, principalmente con la nueva línea 499, que sustituye a la 498-B, y la modificación de la línea correspondiente al número 496.
Esta última une Leganés, Moraleja, Arroyomolinos y Xanadú y a partir del jueves modificará su itinerario para dar servicio a las calles Batres, Tajo y Bélgica.
La línea 499, entre Arroyomolinos y Móstoles, discurrirá por la Avenida de La Unión Europea, con 57 expediciones en días laborables y, como novedad frente a la 498-B, también prestará servicio los fines de semana. Así, los servicios nocturnos de los viernes, sábados y vísperas de festivo también modificarán su recorrido para dar conexión a Xanadú, uno de los centros de ocio de la zona.
Por su parte, el alcalde de Arroyomolinos, Juan Velarde, destacó que las nuevas líneas darán mayor calidad de vida a los ciudadanos, que en cuanto a tiempos se van a ahorrar mucho "porque no es igual llegar a Móstoles, la ciudad más próxima, y tener que hacer un trasbordo que ir directamente a Madrid".
Normalmente, se trata de un recorrido de 35-45 minutos, "depende de cómo esté la circulación", indicó Velarde quien aseguró que si a día de hoy tuviesen el carril bus prometido por el Ministerio de Fomento, "en 25 minutos como mucho estarían en el centro de la capital".
METROBÚS Y CERCANÍAS
Lamela recordó que en la Comunidad de Madrid hay dos realidades, por un lado, la almendra central donde casi el 75 por ciento de los ciudadanos utiliza el transporte público y el resto de la región que globalmente recoge un 49 por ciento a favor del transporte público, y un 51 por ciento el uso de vehículo privado.
"Lo importante es mejorar el transporte público e incentivar al ciudadano a que lo use, no obligarle a que tome decisiones en el ámbito de transportes, y para ello se debe tener en cuenta mejorar las líneas, su frecuencia, ampliarlas o incorporar nuevos medios", apostilló el responsable de Transportes madrileño.
En este sentido, recordó que antes de finalizar la legislatura, Arroyomolinos contará con una nueva línea de Metrobús, así como la nueva línea férrea que la Comunidad de Madrid está construyendo entre Móstoles y Navalcarnero.
Para ello, señaló que los transportes son un sistema y que es fundamental la colaboración de todas las administraciones implicadas. "Hoy por hoy la responsabilidad del Cercanías es de la Administración Central del Estado", apuntó Lamela a la vez que señaló que es necesaria la aplicación directa de la gestión de la Comunidad de Madrid porque es ésta quien mejor conoce las urgencias, las demandas, las necesidades y las prioridades.
"Si --el Gobierno central-- se plantea en serio un plan de Cercanías, queremos que sea un plan consensuado, pactado, acordado por la Comunidad de Madrid y previamente conocido, porque a día de hoy no lo conocemos", concluyó.
