El acusado había sido condenado en julio de 2001 a la medida de tratamiento ambulatorio por un delito de lesiones agravadas
MADRID, 29 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a un hombre con esquizofrenia paranoide a 15 años de internamiento en un centro psiquiátrico por asestar el 19 de octubre de 2005 ocho puñaladas a un celador del Centro de Salud de Cadalso de los Vidrios, al este de Madrid, al que acudía diariamente en aquella época para que le curaran una herida en la cabeza que tenía por un accidente de tráfico.
En su sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, la Sección Tercera absuelve a Fernando B.C., de 55 años, del delito de asesinato en grado de tentativa del que había sido acusado por el Ministerio Público, al aplicarle la eximente completa de alteración psíquica. Aunque se le exime de responsabilidad penal, el acusado tendrá que indemnizar a Juan Ramón F. con 33.200 euros por las lesiones sufridas.
Asimismo, los magistrados exoneran al Servicio Madrileño de la Salud (Sermas) y a la compañía aseguradora Q.B.E. Insurance Europa Limited de la responsabilidad civil subsidiaria reclamada por la acusación particular por permitir que el procesado entrara al ambulatorio con un cuchillo.
En el juicio, el acusado pidió perdón a la víctima y manifestó que no recordaba nada de lo que ocurrió porque estaba bajo los efectos del alcohol y las drogas. El abogado defensor, Rafael García Cepas, subrayó a Europa Press que su cliente sufrió entonces "un brote psicótico de tipo persecutivo" por la bebida y los estupefacientes que había consumido. "El centro de salud no tenía suficiente vigilancia", criticó García Cepas, quien pedirá que se traslade a su representado a un centro de régimen semiabierto, dependiendo de su evolución.
"Noté un golpe y después una puñalada en el lado izquierdo y otra en el pecho. Me asestó cinco puñaladas más. Peleé e intenté quitarle el cuchillo, pero él tiró más fuerte, me arrebató el arma y se fue", relató la víctima en la vista oral.
"TRASTORNO DELIRANTE CRÓNICO"
Según la sentencia, el procesado "no se acordaba de lo sucedido" tras los hechos. "El brote psicótico que tuvo derivado de su enfermedad, que se le había diagnosticado hace veinte años, derivó en un trastorno delirante crónico", subrayan los magistrados, aludiendo a la pericial de la psiquiátrica que le atendió en el centro penitenciario de Navalcarnero, donde estaba ingresado, así como el informe realizado por una especialista de la Clínica Médico Forense.
Se da la circunstancia de que en julio de 2001 el acusado había sido condenado a 18 meses de sumisión a la medida de tratamiento ambulatorio por apuñalar a su cuñado. Se le acusó de un delito de lesiones agravadas por el uso de un cuchillo, con la eximente incompleta de alteración psíquica. La condena se extinguió en septiembre de 2003.
Los hechos ahora juzgados se produjeron al mediodía del 19 de octubre de 2005, cuando el acusado acudió al Centro de Salud de Cadalso de los Vidrios, provisto de un cuchillo de grandes dimensiones que escondía entre sus ropas. "Encontrándose bajo un brote psicótico", según la sentencia, el hombre entró en la consulta donde se encontraba el celador y, cuando se le acercó con el pretexto de hacerle una pregunta, se abalanzó contra él.
VARIAS PUÑALADAS
El encausado le propinó un primer golpe a la altura del costado derecho. Al sentir el ataque se giró y vio el cuchillo. La víctima intentó defenderse, mientras que su agresor continuaba asestándole puñaladas en diversas partes del cuerpo. Las heridas se produjeron en el tórax, en el muslo izquierdo, en las rodillas y en las manos, entre otras zonas.
Las lesiones no provocaron afectación de grandes vasos, ni perforaciones de vísceras huecas abdominales u órganos vitales, pero dieron lugar a una pérdida abundante de sangre con riesgo de shock hemorrágico, que requirió la aplicación de medidas terapéuticas urgentes. Los facultativos del propio centro le atendieron hasta que un helicóptero le trasladó al hospital 12 de Octubre.
Tras abandonar la consulta, el hombre huyó del lugar en un vehículo 'Ford Mondeo', atropellando a otro enfermo, que resultó herido leve. Media hora más tarde, agentes de la Guardia Civil del puesto de Cenicientos lo detuvieron cuando circulaba con su coche por las Rozas de Puerto Real. Tras ser arrestado, aseguró que no recordaba nada de lo que había pasado. Los agentes encontraron en uno de sus bolsillos una navaja marca Celaya.
