Vecinos critican a la Junta Electoral de Zona por haber permitido las concentraciones de ideología ultra en Lavapiés

Actualizado: lunes, 3 marzo 2008 19:28

El único rastro que queda de la batalla campal del viernes son los huecos que han dejado los adoquines arrancados por los violentos

MADRID, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -

La asociación 'Vecinos de Lavapiés' criticó hoy a la Junta Electoral de Zona por haber permitido las concentraciones de organizaciones ultraderechistas y antifascistas el pasado viernes por la tarde en el mismo lugar, la plaza de Tirso de Molina, que terminaron en una batalla campal entre ambos grupos, destrozos en el mobiliario urbano y particular, varios heridos y siete detenidos.

Un portavoz del colectivo, Juan Fernández, aseguró a Europa Press que los vecinos conocían desde hacía días ambas manifestaciones debido a los carteles colocados en el barrio, pero esperaban que fueran prohibidas.

A día de hoy, la plaza de Tirso de Molina y aledañas se encuentran totalmente recuperadas y ya no albergan rastros de la contienda. "Se ha hecho un trabajo de recuperación intenso y se ha repuesto a fondo todo lo que destrozaron", añadió Fernández.

Por su parte, la Asociación de Vecinos 'La Corrala' de Lavapiés aseguró que avisaron a la Junta Electoral de Centro del peligro que suponía que el partido ultraderechista Nación y Revolución celebrase un mitin en el barrio de Embajadores, donde reside un gran número de inmigrantes.

En declaraciones a Europa Press, el presidente de 'La Corrala', Manuel Osuna, afirmó que el único responsable de los incidentes de ayer en Tirso de Molina es la Junta Electoral de Centro, "que permitió el acto incluso después de que le avisáramos del peligro que suponía".

Los vecinos están divididos sobre el grupo causante de los incidentes. Para Rafael, que se encontraba en la zona donde tuvo lugar la manifestación, reconoció que puedo ver "poquitos ultraderechistas" y defendió que este acto es "un montaje para hacer que la gente vote", ya que fue una "provocación" pensada por la Junta Electoral, para "fomentar el enfrentamiento" entre derecha e izquierda. En cambio, para otros vecinos se trató de una provocación de los grupos de la extrema derecha para poder hablar de inseguridad. BALANCE DE LOS INCIDENTES Según el balance de los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, los manifestantes quemaron barios contenedores, cubos de basura y papeleras, que en muchos casos habían sido utilizadas a modo de barricadas. Al menos siete vehículos resultaron dañados, tres de ellos afectados por fuego y el resto roturas de lunas y retrovisores. Al igual que con los contenedores, los manifestantes movieron algunos de los vehículos para cortar las calles y rompieron los cristales de varios escaparates y de la sucursal de Deutche Bank.

Asimismo, los violentos lanzaron objetos contundentes, entre los que se encontraban botellas, adoquines arrancados de las propias calles y piedras, contra un camión de bomberos, aunque no hubo que lamentar daños personales. Así, los únicos signos evidentes del enfrentamiento son precisamente los adoquines que faltan en las calles y algunas plásticos quemados, indicaron los vecinos.