Publicado 27/11/2018 14:15

Bosch desarrolla un sensor que permite localizar con precisión los vehículos automatizados

Sensor de localización de Bosch
BOSCH

STUTTGART (ALEMANIA), 27 Nov. (EUROPA PRESS) -

Bosch ha desarrollado un sensor de movimiento y posicionamiento del vehículo con una unidad receptora de alto rendimiento para las señales del sistema global de navegación por satélite (GNSS), que un vehículo automatizado necesita para determinar su posición exacta y aumentar su eficiencia y seguridad, según ha informado la compañía en un comunicado.

El reto con el posicionamiento basado en satélites, según la marca, radica en solucionar las inexactitudes en los datos. Los satélites GNSS orbitan la tierra a una distancia de 25.000 kilómetros y a velocidades de 4.000 metros por segundo. A medida que sus señales se acercan al suelo, deben atravesar la ionosfera y las capas de nubes de la troposfera, las cuales dispersan las señales e introducen errores. Aunque las señales son lo suficientemente precisas para los sistemas de navegación actuales, no satisfacen las necesidades de la conducción automatizada.

Por esta razón, Bosch utiliza los soportes de corrección de datos suministrados por varios proveedores y creó la 'joint venture' Sapcorda en 2017. Con la ayuda de una red de estaciones terrestres de referencia cuyas posiciones se conocen con precisión, estos proveedores pueden corregir la inexactitud de la información de posicionamiento de los GNSS.

Los datos de corrección llegan al coche a través de una nube o de satélites geoestacionarios. Las señales GNSS no son la única información que recibe el sensor de movimiento y posicionamiento del vehículo: gracias a los sensores de velocidad de rueda y del ángulo de dirección, que se asemejan al sentido humano del tacto, sabe a dónde se dirige el coche y la velocidad a la que circula.

Además, el sensor de movimiento y posicionamiento del vehículo cuenta con sensores de inercia integrados, comparables al oído interno en los humanos. Al igual que la gente puede moverse con la ayuda de sus sentidos de tacto y equilibrio, el sensor puede utilizar estos datos para saber a dónde se está dirigiendo el vehículo.

La conducción automatizada requiere una gran cantidad de servicios inteligentes, sin los cuales ningún vehículo será capaz de conducir de forma autónoma. "Los servicios son al menos tan importantes para la conducción automatizada como el hardware y el software", explicó el miembro del consejo de administración de Bosch, Dirk Hoheisel. "Debemos seguir simultáneamente las tres rutas para conseguir coches automatizados que sean seguros y fiables en nuestras carreteras".