Actualizado 16/05/2007 16:14

Economía/Motor.- Acea reclama que la normativa europea sobre emisiones tenga unos costes eficientes y pide más tiempo

MADRID, 16 May. (EUROPA PRESS) -

El marco normativo europeo que limita las emisiones contaminantes máximas de los vehículos en 130 gramos de dióxido de carbono en 2012 debería tener un coste eficiente para los fabricantes de automóviles y tendría que contar con un periodo de adaptación suficiente, según explicó el presidente de la Asociación de Fabricantes Europeos de Automóviles (Acea, por sus siglas en inglés) y consejero delegado de Fiat, Sergio Marchionne.

El máximo responsable de Acea hizo hincapié en el importante papel que puede desempeñar la industria de la automoción europea e internacional a la hora de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, aunque solicitó más tiempo y un nuevo enfoque que permita a los constructores reducir el impacto medioambiental con una viabilidad económica.

"La industria del automóvil europea demanda una política con costes eficientes para reducir las emisiones de CO2 de los coches", añadió. Al mismo tiempo, indicó que los factores clave para reducir el impacto de la automoción sobre el medio ambiente son una combinación de la gestión del tráfico, el uso de biocombustibles, un estilo de conducción más económico, unas tasas impositivas para el CO2 y mejoras en la tecnología de los vehículos.

Marchionne resaltó que la puesta en marcha de todas estas iniciativas medioambientales servirá para reducir el impacto sobre el medio ambiente del sector, sin que repercuta sobre los puestos de trabajo de la industria en la Unión Europea. "No cabe duda de que la industria está haciendo su parte. No estamos escondiéndonos de nuestra responsabilidad", apuntó.

La nueva normativa europea sobre emisiones de los vehículos, aprobada recientemente por la Comisión Europea, contempla la reducción hasta 130 gramos de CO2 por cada cien kilómetros recorridos los gases máximos emitidos por un vehículo en 2012.

Así, Acea explica que la investigación y el trabajo que tiene que llevar a cabo a la industria automovilística para cumplir este objetivo "es demasiado caro", por lo que ésta no podrá cumplir con el objetivo europeo.

De esta manera, Marchionne resaltó que esta propuesta se centra sólo en el desarrollo de nueva tecnología para los vehículos y no involucra a otros sectores o propone nuevas medidas de actuación. "La actual propuesta está desequilibrada, es inadecuada y económicamente ineficiente", incidió.

En otro sentido, el presidente de Acea destacó que para cumplir con este nuevo marco normativo se necesita un mayor plazo de tiempo, como mínimo ampliar el plazo hasta 2015, debido a la complejidad del desarrollo de nuevas tecnologías que permitan reducir el impacto de los vehículos.

Para finalizar, Marchionne solicitó que se reconozca el trabajo realizado por los fabricantes de automóviles en el pasado para disminuir el impacto medioambiental de su negocio, sobre todo en lo que se refiere a emisiones contaminantes de los coches. Así, entre 1995 y 2005 el sector ha reducido los gases emitidos en un 13%.