MOSCÚ, 19 Sep. (EP/AP) -
El mayor fabricante de vehículos de China, Great Wall Motors, está estudiando la posibilidad de construir una planta de ensamblaje junto al río Volga en la República de Tatarstán (Rusia) con 79 millones de euros de inversión, según informó el ministro ruso de Desarrollo Económico y Comercio, German Gref, durante una reunión con el ministro de Comercio chino, Bo Xilai.
"Hemos tomado todas las decisiones fundamentales necesarias", indicó Gref, quién resaltó que sólo faltan por concretar los detalles técnicos para culminar el acuerdo entre los gobiernos ruso y chino sobre la construcción de una nueva planta de la compañía automovilística en Rusia, por lo que el trato podría cerrarse el próximo mes de noviembre. Great Wall ya había anunciado su intención de crear una planta de ensamblaje en Tatarstán durante el pasado mes de marzo. Para el desarrollo de este proyecto de construcción la compañía invertirá 100 millones de dólares (cerca de 79 millones de euros).
La nueva fábrica tendrá una capacidad de producción de alrededor de 50.000 vehículos al año. Rusia ha sido el país elegido por la marca asiática porque es un país que está sufriendo un gran crecimiento económico en los últimos años.
