La firma Treves Galicia prevé aplicar otro ERE entre febrero y marzo
PONTEVEDRA, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
La compensación salarial es el principal escollo en la negociación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) entre los trabajadores y la directiva de Gonvarri, empresa auxiliar del sector de la automoción ubicada en el puerto de Marín (Pontevedra).
Los responsables de la firma ofrecieron abonar el 80 por ciento del salario de sus 85 empleados por los dos meses durante los que paralizará su actividad, aunque los representantes del comité de empresa exigen una retribución del 100 por cien sin pérdida de derechos.
La reunión celebrada hoy para analizar la oferta que la directiva de Gonvarri realizó la semana pasada concluyó sin un acuerdo entre las partes, por lo que se fijó otro encuentro este jueves a fin de someter estas propuestas a una última valoración.
Asimismo, los representantes de los trabajadores y los responsables de la firma aguardarán a que se renueven las ayudas autonómicas al sector de la automoción para atenuar así los efectos del ERE.
El representante sindical de UGT, José Carlos del Río, explicó que el ERE se limita a 60 días de paro "como máximo", confiando en que incluso se puedan ver rebajados con las ayudas de la Xunta.
NUEVO ERE EN TREVES
Por otra parte, la planta de Treves-Galicia, dedicada a la producción de fundas de asientos para automóviles, podría registrar otro Expediente de Regulación de Empleo de materializarse la solicitud realizada por esta compañía ubicada en Pontevedra para parte de febrero y marzo.
Después de que la Consellería de Traballo aprobara un primer ERE que rebajó los días de paro de los 67 solicitados por la empresa a 23, la firma auxiliar presentó una nueva propuesta para suscribir otros 21 días de paro total que afectarían a los casi 150 trabajadores al acusar la importante reducción en los planes de producción de Citroën.
Este nuevo ERE, que se prevé impulsar entre los meses de febrero y marzo, es rechazado por el sindicato CIG, cuyo secretario comarcal, Rafael Iglesias, aseguró que "sólo trata de enmascarar el verdadero problema de la fábrica, el exceso de personal". La central nacionalista reiteró que la empresa pretende deslocalizar su producción y recordó que Trevés ya ha cerrado dos centros similares de textil en Girona y Valladolid.
