Actualizado 07/09/2007 15:41

Economía/Motor.- Renault asegura que la planta con Nissan en Tánger tendrá efectos "nulos" para las fábricas españolas

VALLADOLID, 7 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente director general de Renault-España, Juan Antonio Fernández de Sevilla, aseguró hoy que la factoría que abrirá la alianza Renault-Nissan en Tánger (Marruecos) tendrá efectos "nulos" para el futuro a seis o diez años de las fábricas españolas, y, por lo tanto, para la planta de Carrocerías-Montaje de Valladolid.

De este modo se pronunció Fernández de Sevilla a preguntas de los periodistas hoy durante la inauguración de la 73 edición de la Feria Internacional de Muestras de Valladolid, en la que Renault cuenta con un expositor de 800 metros cuadrados para dar a conocer las principales novedades y productos de la marca del rombo.

De Sevilla, que previamente se había reunido durante cerca de una hora con los sindicatos con representación en Renault para analizar el impacto que podría tener la nueva factoría de Marruecos, insistió en su mensaje de que esta apertura tendrá un efecto "neutro" en las factorías españolas durante un periodo de tiempo de seis o diez años en los que también habrá que tomar la decisión del sustituto de los coches que hoy componen la gama i.

"Para España y para la fábrica en concreto, que era la preocupación máxima del Comité de la factoría de Montaje en Valladolid el impacto es nulo", continuó Juan Antonio Fernández de Sevilla, que se mostró convencido de que la situación de las plantas vallisoletanas "no mejora, no empeora, en principio, por la ubicación de una fabricación en Marruecos". "Los mismos motivos de preocupación que podían existir antes de Marruecos, si alguien los quería tener, siguen existiendo porque no cambia la situación", precisó.

Al contrario, aseguró el presidente director general de Renault-España, la apertura de una nueva fábrica de la alianza en Marruecos será una "circunstancia absolutamente positiva" para los intereses del grupo automovilístico, en general, y para España, en particular, ya que el centro geopolítico de la producción de Renault en Europa se desplazará hacia el sur obligando a la industria auxiliar a situarse allí.

"Estamos a 15 kilómetros de España y eso quiere decir que las fabricaciones españolas se beneficiarán de esos proveedores que estarán implantados en Marruecos y con precios, por tanto, bastante más competitivos porque la renta media de Marruecos es lo suficientemente baja para que tenga una repercusión positiva en los trabajadores", aseveró.

Del mismo modo, aclaró que la nueva factoría de la alianza Renault-Nissan en Tánger se dedicará a la producción del Dacia Logan, un tipo de coche de bajo coste, distinto por lo tanto a la gama i que se fabrica en Europa Occidental. "Por lo tanto, no afecta a la fábrica de Valladolid y esto va a ser así durante muchos años", garantizó el máximo responsable de Renault en España que auguró que este vaticinio se mantendrá durante un plazo de 6 o 10 años, "más allá es un plazo demasiado largo", consideró.

Fernández de Sevilla quiso terminar su comparecencia con un mensaje claro a los sindicatos y a los trabajadores de las factorías españolas: "El impacto será neutro y sigue vigente de A a Z todo lo que dijimos a nuestros representantes de los trabajadores y a nuestros trabajadores con motivo de las recientes conversaciones del convenio. Todo sigue igual", sentenció el presidente director general de Renault-España, que, no obstante, reconoció la preocupación de los empleados por su futuro.