Castilla-La Mancha defiende su derecho al agua para asegurar su crecimiento demográfico, industrial, agrícula y ganadero

Europa Press Murcia
Actualizado: sábado, 28 abril 2007 13:34

MURCIA/TOLEDO 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente primero del Gobierno de Castilla-La Mancha, Fernando Lamata, defendió hoy que su región "tiene derecho al agua para desarrollar su crecimiento demográfico, pero también su crecimiento industrial, agrícola y ganadero", respecto a los beneficios que obtendrá la agricultura manchega con la caducidad al trasvase Tajo-Segura.

En este sentido, Lamata aseguró que "tenemos agua bastante porque se generan 6.500 hectómetros cúbicos al año y utilizamos 2.200. Es verdad que no están los sistemas de aprovechamiento de todos los caudales. Pero ahí es donde estamos trabajando. Es lo primero que el presidente Barreda se propuso y por eso pactó con el Gobierno de España el programa AGUA, con 2.000 millones de euros" concluyó.

Por otro lado, el Gobierno de Castilla-La Mancha confía en que una vez finalice la negociación del Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG), cuyo plazo de alegaciones termina el 3 de mayo, quede aprobado en torno al verano, para que el Gobierno de la nación lo incluya en los presupuestos del 2008.

Así lo confirmó Fernando Lamata en el programa 'A pie de campo' de Radio Castilla-La Mancha, que recoge Europa Press, donde señaló que "el primer anteproyecto se hace en torno al mes de julio, y se empiezan a ver los detalles en septiembre. Esas son las fechas interesantes para que tengamos el decreto aprobado y consigamos asignaciones presupuestarias importantes en 2008".

Destacó también Lamata que en el decreto del Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG) que está en fase de alegaciones, se ha cambiado el concepto del anterior plan, con el que solo se pretendía recuperar los acuíferos, para incluir programas agrícolas, industriales, medioambientales, y de desarrollo socioeconómico, que mantengan la calidad y cantidad de renta en toda la zona afectada.

Así, recordó el compromiso del Gobierno de la nación de dotar de financiación suficiente para poder llevarlo a cabo, y explicó que el presupuesto de 3.000 millones de euros comprometidos por José Luis Rodríguez Zapatero, se irá consignado a medida que se vayan poniendo en marcha las diferentes medidas, algunas de las cuales ya se están realizando, "como la tubería manchega que estaba en documentos desde 1996 y ahora se ha empezado a construir".

"Hay cantidades que se están ejecutando pero que están valiendo para poner en marcha la maquinaria, pero la cantidad fuerte tendrá que venir en el presupuesto del año que viene y ahí tendrán que verse los programas de desarrollo agrícola o de desarrollo industrial entre otros".

"Estamos avanzando paso a paso, con prudencia, sin echar las campanas al vuelo porque es un tema complejo pero sí diciendo que vamos en la buena dirección, porque además lo estamos haciendo con todos los implicados" afirmó Lamata, que ha asumido temporalmente las funciones en Agricultura, ante la baja por maternidad de la consejera, Mercedes Gómez.

Se refirió también a la creación de un consorcio entre el Ministerio de Medioambiente y la Junta de Comunidades, a fin de tratar todos los asuntos que han de ser gestionados de manera conjunta, consorcio que responde a "la filosofía de sumar esfuerzos".

"Podríamos decir que no es nuestro asunto y lavarnos las manos porque la competencia sobre el agua es del Gobierno de España, pero no diríamos toda la verdad porque Castilla-La Mancha tiene competencias en agricultura, en medioambiente, y en desarrollo industrial, y en definitiva tenemos que velar por los intereses de los castellano-manchegos. En ese sentido hemos querido mojarnos, poner nuestro esfuerzo y sudar la camiseta porque para eso nos han votado los ciudadanos".

Lamata, que incidió en la importancia del plan, que afecta a cuatro provincias y a muchos agricultores, manifestó que durante estos meses de negociación ya se ha puesto en marcha alguna medida, como el banco de agua, o la compra tierra en el entorno de las tablas de Daimiel para reducir el consumo del agua de ese zona.

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