MURCIA, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
Cerca de 70.000 murcianos, un 30 por ciento de la población, entre 55 y 75 años, podrían sufrir algún tipo de pérdida auditiva, según un estudio realizado por GAES, con lo que "actividades tan cotidianas como escuchar la televisión o seguir una conversación por teléfono suponen un problema para un 10 por ciento y un 4 por ciento de los murcianos, respectivamente".
Precisamente, GAES Centros Auditivos, en colaboración con el Área de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Murcia, pondrá en marcha un ciclo de conferencias "con el objetivo de ofrecer información sobre el oído y algunas pautas para prevenir posibles problemas de audición". Estos encuentros se impartirán en siete centros de mayores de la Región durante los días 25, 26 y 27 de noviembre.
Las charlas ofrecerán algunas de las claves y consejos para disfrutar de una buena salud auditiva, desmitificar los tabúes existentes en torno a la pérdida auditiva, así como insistir en la importancia que tiene realizarse revisiones auditivas de forma periódica.
Y es que "los expertos insisten en que no podemos olvidar que la pérdida de audición es un problema de salud, que puede llegar a condicionar la vida de las personas que la padecen si no se ponen en manos de un especialista".
Sólo en la Comunidad de Murcia, según datos procedentes de un estudio de mercado realizado por GAES, cerca del 50 por ciento de la población no se ha realizado nunca una revisión auditiva. Una cifra que "sin embargo contrasta con el hecho de que para los murcianos el oído sea el segundo sentido en importancia, después de la vista".
Algunas de las primeras señales que pueden indicar que una persona padece problemas de audición se manifiestan en situaciones del día a día, "como no poder seguir una conversación, pedir que nos repitan las palabras, o incluso escuchar la televisión y la radio muy altas". Una situación que afecta a un 8 por ciento de la población total, lo que supone que más de 3.500.000 de españoles podrían padecer problemas auditivos en nuestro país. De hecho, se considera que "es la tercera afección en importancia, después de la artrosis y la hipertensión".
