MURCIA, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
Ciudadanos defenderá este miércoles en la Subcomisión de Agua y Cambio Climático un gran Pacto Nacional del Agua que sirva para la actualización del Plan Hidrológico Nacional, "adaptándolo al reto del cambio climático y la sostenibilidad, con la vista puesta en el horizonte de 2030".
Así lo ha afirmado este martes en Madrid, durante la visita al 'stand' de la Región de Murcia en la feria Fruit Attraction, el diputado José Luis Martínez, que participa en la subcomisión junto al parlamentario por Valencia Toni Cantó.
Martínez ha desvelado que el documento que Ciudadanos presentará la subcomisión de este miércoles cuenta con 58 recomendaciones "basadas en cuatro grandes ejes, del que alcanzar la sostenibilidad es el primero y más urgente".
Ciudadanos mantiene asimismo la defensa del trasvase Tajo-Segura, y ha criticado la "incoherencia" de un PSOE que en este sentido "se ha 'podemizado' y ha puesto en el punto de mira nuestra agricultura y toda la riqueza y empleo que genera a cambio de unos meses de hipoteca de La Moncloa".
El diputado naranja considera que el dictamen que pretende aprobar mañana PSOE junto a Podemos y grupos como ERC y Compromís "es sumamente negativo para la Región y todo el Sureste, ya que cuestiona la idoneidad de los trasvases, incluyendo el Tajo-Segura y niega que seamos una cuenca deficitaria en contra de todos los criterios técnicos".
El congresista advierte de que esta revisión pondría incluso en riesgo el agua de boca y ha reiterado que si este dictamen sale adelante "estarían condenando a los murcianos a ser migrantes climáticos y al subdesarrollo".
"Tenemos a un PSOE que con una mano firma el Pacto Regional del Agua y con la otra sentencia a muerte al Tajo-Segura con sus nuevos amigos de Podemos, como demuestra el documento que han consensuado para su votación mañana en la Subcomisión de Agua y Cambio Climático", ha criticado Martínez, quien ha añadido que "por el otro lado tenemos a un PP que después de desperdiciar décadas de mayorías absolutas sin aportar ninguna solución se encuentra ahora fuera de juego, o más bien jugando a dos barajas, una en la Región aferrándose a la bandera ya arriada del Agua para Todos y otra en Castilla-La Mancha defendiendo la elevación del caudal mínimo trasvasable, o traducido a román paladino, el fin del Trasvase Tajo-Segura".
El documento que defenderán Martínez y Cantó en la Subcomisión de Agua y Cambio Climático incluye también recomendaciones como la creación de un Banco Público Nacional de Aguas que gestione de forma centralizada los intercambios de recursos.
También pide el refuerzo de las confederaciones hidrográficas e impulsar la depuración y reutilización del agua para que se adapte a los parámetros de la economía circular. "La sostenibilidad es el armazón de nuestro discurso, pero también incluimos ocho recomendaciones sobre la prevención tanto de sequías como inundaciones y dos grandes bloques sobre la reforma de la gobernanza del agua y del derecho que la regula", ha añadido Martínez.
En este sentido, Ciudadanos pide una revisión profunda de la Ley de Aguas "bajo el prisma de la economía circular, y queremos que esta reforma esté guiada y asesorada por el rigor científico-técnico y no por la política".
PRINCIPALES RECOMENDACIONES DE CIUDADANOS A LA SUBCOMISIÓN:
El instrumento básico necesario es alcanzar un gran Pacto Nacional del Agua, y la actualización del Plan Hidrológico Nacional, adaptado al reto del cambio climático y escenarios 2030-2040.
Los caudales ecológicos deben quedar claramente definidos como caudales medioambientalmente adecuados bajo el principio de precaución.
Más técnicos cualificados, sobre todo hidrogeólogos, en las Confederaciones Hidrográficas.
Gestionar la recarga de los acuíferos, en todas sus formas.
Actualmente hay aguas depuradas que se están vertiendo al mar en lugar de reutilizarse en el ciclo urbano o para la recarga de acuíferos. En ocasiones las estrategias de recarga se encuentran con problemas legales y normativos al considerarse esas recargas como vertidos, cuestión que hay que cambiar urgentemente.
Incrementar la depuración y reutilización del agua, dentro del marco general de impulso de la economía circular con una gestión integral del ciclo urbano del agua, el aprovechamiento máximo de las sinergias con la producción de energía y revisar los incentivos de tal forma que debe asegurarse que sea más barato depurar que pagar las multas o cánones de vertido.
Realizar una auditoría del agua disponible y de los diversos usos, y en particular del regadío.
Hay que terminar con los pozos y regadíos ilegales y los desarrollos urbanísticos descontrolados.
Modernizar los regadíos e incentivar las ganancias en eficiencia sin que eso se traduzcan en una expansión de la actividad que tenga como resultado final una mayor demanda de agua.
Incorporar el desarrollo de fuentes no convencionales (regeneración, desalación) con energías renovables.
Las desaladoras son instalaciones que demandan un coste anual importante por lo que hay que interconectar desaladoras y embalses, mezclando caudales, para amortizar mejor una mayor producción de agua desalada.
En lugar de los contratos de cesión y centros de intercambio por cuencas, es preferible la creación un Centro de Intercambio único para todo el país, un Banco Público Nacional de Aguas.
Dotar de medios y desarrollar los planes de sequía en municipios con más de 20.000 habitantes previsto por la legislación, pero que no se cumple. En el Júcar de 72 municipios y consorcios existentes sólo 15 lo hicieron y la Confederación ni siquiera les respondió en su función de control
Hay que reforzar la independencia de los informes técnicos en la toma de decisiones políticas.
Destinar los ingresos por el agua (cánones y tasas) a inversiones y protección de los cauces de los ríos, como prescribe la Ley de Aguas.
La próxima reforma del sistema de financiación autonómica y local deberá tener en garantizar recursos suficientes para afrontar los retos en residuos, agua y cambio climático de acuerdo con el marco de competencias.
Promover la creación de grandes comunidades de usuarios que permitan desarrollar una gestión moderna y compleja que sea más eficiente, en lugar de las pequeñas comunidades de regantes tradicionales, y es fundamental que también se impulsen las comunidades de usuarios de aguas subterráneas.
