ÁGUILAS (MURCIA), 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil ha detenido en Águilas (Murcia) a dos personas, e investigado a otras cuatro, por su presunta implicación en un entramado relacionado con estafas en el sector de la construcción por valor de 300.000 euros, informaron fuentes de la Benemérita en un comunicado.
En concreto, los arrestados son el denunciante, de 43 años, residente en Águilas y de nacionalidad ecuatoriana, y una segunda persona.
La investigación se inició a finales del pasado año, cuando un hombre que refería ser propietario de una empresa de construcción y reformas denunció haber sido víctima de amenazas con arma de fuego.
En su relato aseguró que uno de sus clientes se había personado en una obra en el municipio de Cartagena, junto a otros dos personas armadas, para amenazarlo de muerte a cuenta de una supuesta deuda.
El Instituto Armado inició una investigación que llevó a los agentes a sospechar que las amenazas nunca llegaron a producirse. De esta forma, el foco de atención se centró en el propio sujeto que se había presentado como víctima hasta descubrir que existían ciertas dudas sobre la operatividad de la empresa que regentaba.
Según avanzaba la investigación, los guardias civiles fueron descubriendo que existía un importante número de perjudicados, supuestamente relacionados con la contratación de los servicios de esta empresa, que podían haber sido víctimas de un delito de estafa.
La información recopilada permitió determinar que se trataba de una mercantil que ofrecía sus servicios de construcción y reforma a través de una página web, donde, además, aparecían fotografías de espectaculares viviendas para acreditar su reconocida solvencia y el prestigio de la empresa.
CAUSABAN DESTROZOS Y LOS OCULTABAN
El 'modus operandi' se iniciaba con la captación de clientes con los que el propietario acordaba un presupuesto. Realizado un primer pago, comenzaba la obra, en la que entraban en escena los operarios, de los que luego se pudo averiguar que tenían una escasa o nula formación en albañilería. Estos llevaban a cabo una serie de demoliciones sin mantener las mínimas medidas de seguridad para, seguidamente, tapar los destrozos con planchas de pladur, simulando que en la pared ya se había realizado las instalaciones contratadas.
Cuando los propietarios pretendían visitar la obra en cuestión, el supuesto cabecilla acordaba la presencia en el lugar de los supuestos trabajadores que simulaban ser una cuadrilla que desarrolla las tareas con diligencia.
Mientras, e incluso cuando la obra no se ceñía a lo presupuestado, el principal cabecilla seguía solicitando dinero a sus clientes a cuenta de supuestas licencias de obra, materiales y otros gastos derivados de la reforma.
Cuando los clientes se percataban de la estafa, incluso meses después de iniciada la obra, el supuesto estafador los denunciaba por unas supuestas amenazas que, según se desprende de la investigación, nunca se llegaron a producirse.
Los indicios obtenidos por los investigadores han permitido constatar que se trata de una supuesta organización criminal que actuaba de forma sistemática con el mismo 'modus operandi', con el que, hasta el momento, podría haber obtenido 300.000 euros.
La operación ha culminado con la detención de dos personas y la investigación de otras cuatro, todas ellas como presuntas autoras de UN delito de estafa continuada. Al cabecilla, además, se le atribuye la presunta autoría de un delito de denuncia falsa.
Los arrestados y las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del juzgado de instrucción número 3 de Cartagena.